El ejército israelí solicitará asesoría legal durante futuras ofensivas, dijeron el miércoles varios funcionarios de seguridad, debido a las acusaciones de crímenes de guerra que siguieron a la campaña del año pasado en la Franja de Gaza. Ademas, la oficialidad recibirá un entrenamiento más intensivo sobre las normas de la guerra y el derecho internacional, agregaron los funcionarios.
El teniente general Gabi Ashkenazi ordenó al ejército que consulte con sus asesores legales en el transcurso de las operaciones y no solamente en la fase de planificación, como en el caso de la ofensiva en Gaza, dijeron los funcionarios, que hablaron a condición de guardar el anonimato por no estar autorizados a tratar el tema con los medios de comunicación.
El vocero de la oficina del ejército no formuló comentarios.
La nueva política fue adoptada tras las conclusiones de una comisión de Naciones Unidas, de que Israel cometió crímenes de guerra durante su expedición armada en la Franja de Gaza.
Tanto mandos militares como representantes políticos han tenido que cancelar viajes a Gran Bretaña ante las gestiones de los activistas palestinos de encausarlos bajo la ley de la justicia universal contra estos delitos.
Israel realizó una operación militar en la Franja de Gaza para impedir que los extremistas islámicos del grupo Hamas lanzaran cohetes contra el sur del estado judío. Empero, la operación fue criticada internacionalmente por el número de muertos civiles palestinos, más de 900 según fuentes palestinas, entre más de 1.400 víctimas fatales.
En el conflicto murieron también 13 israelíes. Empero, la procuradora general de Gran Bretaña, Patricia Janet Scotland, dijo el martes en un discurso pronunciado en la Universidad Hebrea de Jerusalén que su gobierno “examina con urgencia la forma de alterar el sistema británico para evitar que vuelva a plantearse esta situación y está decidido a que los líderes israelíes deberían poder viajar siempre con entera libertad a Gran Bretaña”.