El número de mujeres en Estados Unidos que no tienen hijos en la actualidad es el más alto desde que la Oficina de Censo comenzó a llevar datos al respecto, en 1976.
Casi la mitad de todas las estadounidenses, 47,6%, entre 15 y 44 años no tenía hijos en 2014, cifra que subió desde 46,5% en 2012, según el organismo gubernamental. El promedio de mujeres sin hijos en ese rango de edad ha venido aumentando desde que hace casi 40 años era de 35,1%.
La tasa general de fertilidad en el país cayó por sexto año consecutivo en 2013. En ese momento era de 1,86 niños por mujer según el diario New York Times. Una tasa de fertilidad de 2,1 hijos por mujer es la requerida para mantener estable la población estadounidense. El descenso en la tasa de fertilidad es más notable porque el número de mujeres en la edad ideal para concebir, entre 20 y 39 años, ha venido creciendo desde 2007.
“Los estadounidenses no se han preocupado mucho por las tasas de nacimiento en el pasado, porque tenemos el ‘grifo’ de la inmigración para abrirlo o cerrarlo”, dijo Andrew J. Cherlin, demógrafo familiar en la Universidad Johns Hopkins al New York Times. “Es un problema mayor en Europa, en donde países como Alemania y España tienen tasas mucho más bajas”.