Chiapas, ya que Juan Sabines mató a hierro y quizá a hierro muera dentro de unas semanas.
Le platico, sucede que el aun gobernador Juan Sabines tras su elección, tuvo a bien crear el equipo de transición que estuvo en contacto en todo momento con los funcionarios de la administración del gobernador (en aquel entonces) saliente Pablo Salazar Mendiguchía, pero comenzaron a salir una serie de gastos y desvíos públicos, que nadie entendía y comprendía así que Juan Sabines no dudó ni tantito y encerró a Pablo Salazar Mendiguchía por peculado de 104 millones de pesos.
El gobernador Juan Sabines obtuvo mucho carisma y apoyo popular, ¡felicidades! Pero ahora que se va parece que cometió los mismos errores que Pablo Salazar Mendiguchía y con el gobernador electo Manuel Velasco Coello, ya no hay una buena relación y caray, quizá y haya auditorias e investigaciones que puedan llevarlo a la cárcel.
Manuel Velasco Coello no ha dejado de mostrar que ya la relación con Juan Sabines ya no es la mejor y que no permitirá ciertas cosas que el equipo de transición, está encontrando.
Juan Sabines debió enterrar bien sus cadáveres en el closet, no dejarlos como muchos lo hacen casi casi sobre la cama, ya que no entienden que quien llega no estará solapando las cosas que le heredan; en Morelos el gobernador Graco Ramírez no quiere el atender la totalidad del tema de los maestros pensionados, una deuda de más de 100 millones de pesos, pero Marco Adame simplemente no da la cara y parece que a la voz de “debo no niego pago no tengo” se va y deja la bomba activada.
Bellezas de nuestra clase política mexicana ¿verdad?, veamos si en un año o dos Juan Sabines no termina siendo compañero de celda de Pablo Salazar Mendiguchía en algo que ya algunos llaman “justicia poética”.
Dicen que la historia en muchas ocasiones se repite, esto podríamos verlo dentro de poco en el gobierno de Le platico, sucede que el aun gobernador Juan Sabines tras su elección, tuvo a bien crear el equipo de transición que estuvo en contacto en todo momento con los funcionarios de la administración del gobernador (en aquel entonces) saliente Pablo Salazar Mendiguchía, pero comenzaron a salir una serie de gastos y desvíos públicos, que nadie entendía y comprendía así que Juan Sabines no dudó ni tantito y encerró a Pablo Salazar Mendiguchía por peculado de 104 millones de pesos.
El gobernador Juan Sabines obtuvo mucho carisma y apoyo popular, ¡felicidades! Pero ahora que se va parece que cometió los mismos errores que Pablo Salazar Mendiguchía y con el gobernador electo Manuel Velasco Coello, ya no hay una buena relación y caray, quizá y haya auditorias e investigaciones que puedan llevarlo a la cárcel.
Manuel Velasco Coello no ha dejado de mostrar que ya la relación con Juan Sabines ya no es la mejor y que no permitirá ciertas cosas que el equipo de transición, está encontrando.
Juan Sabines debió enterrar bien sus cadáveres en el closet, no dejarlos como muchos lo hacen casi casi sobre la cama, ya que no entienden que quien llega no estará solapando las cosas que le heredan; en Morelos el gobernador Graco Ramírez no quiere el atender la totalidad del tema de los maestros pensionados, una deuda de más de 100 millones de pesos, pero Marco Adame simplemente no da la cara y parece que a la voz de “debo no niego pago no tengo” se va y deja la bomba activada.
Bellezas de nuestra clase política mexicana ¿verdad?, veamos si en un año o dos Juan Sabines no termina siendo compañero de celda de Pablo Salazar Mendiguchía en algo que ya algunos llaman “justicia poética”.