Hace unos días el Papa Francisco envió un saludo especial a su país, Argentina, por la beatificación de José Gabriel Brochero, el “cura gaucho”.
La felicidad que embarga al Papa Francisco es porque que el nuevo beato, José Gabriel Brochero, el “cura gaucho” en el siglo XIX, fue quien expandió el catolicismo por el centro de su país a lomo de mula.
Ayer durante el rezo del Angelus dominical, ante miles de personas congregadas en la Plaza de San Pedro del Vaticano, el pontífice se refirió al nuevo beato tanto en italiano como en español.
Recordó el Papa Francisco que José Gabriel Brochero, el “cura gaucho” fue sacerdote de la diócesis de Córdoba, nació en 1840 y murió en 1914. Destacó que “empujado por el amor de Cristo” se dedicó enteramente su grey.