Mientras que las votaciones estimadas para los tres principales partidos parecen haberse estancado en los límites que marcan sus electores estables, el Partido Verde consigue colocarse como la cuarta fuerza electoral con un estimado, hoy, de 2.5 millones de votos a su favor.
Si bien el número de votos que podrían obtener tanto el PAN como el PRI es ligeramente superior al que medimos en abril, y el PRD tiene exactamente las mismas preferencias que hace un mes, el incremento de la intención de voto por el Partido Verde ha hecho que en el escenario de mayo los porcentajes de las tres principales fuerzas políticas bajaran drásticamente.
En abril se apuntaba que el PRI podría obtener 40% de las preferencias, con los cuales calculábamos que podría ganar 165 distritos de mayoría haciendo una extrapolación de los resultados obtenidos en las elecciones locales de 2007 y 2008. Esta combinación de resultados, debido a la
cláusula de sobrerrepresentación de la Ley, hacía que el tricolor perdiera 10 diputados plurinominales, la mayoría de los cuales quedaban asignados al PAN.
Si bien el porcentaje de votación estimado para el PRI baja a 36% debido a la irrupción del Partido Verde en la escena electoral, el contexto de mayo se ve mucho más favorable para el tricolor que el de abril, ya que su alianza con el Partido Verde le asegura por lo menos esos 165 distritos de mayoría que calculábamos hace un mes, pero ahora los plurinominales que no podía mantener el tricolor por la sobrerrepresentación pasan a su aliado, el Partido Verde, y no al PAN.
Si este escenario se mantiene en julio próximo, por primera vez desde 1994, se tendría una Cámara de Diputados en la que dos partidos aliados conseguirían la mayoría absoluta, ya que el PRI y el Verde sumarían en conjunto 252 diputados.
Hablando de las campañas quisiera destacar dos diferencias que me parecen fundamentales entre la estrategia del Verde y la de los otros partidos: Primero, el Verde no está utilizando ni la imagen ni los nombres de sus candidatos como base de su propaganda electoral como sí lo están haciendo PAN, PRI y PRD, será porque entendieron a tiempo que en una elección de diputados las preferencias de los electores se definen por la marca que le dan los partidos a sus candidatos y no a la inversa, como pretenden asegurarlo demasiados gurús del marketing político, de esos que andan por ahí haciendo negocios millonarios basándose en las inseguridades del prójimo.
Segundo, y muy importante, es que el Partido Verde ha sabido restringir su oferta a dos o tres asuntos ante los cuales presenta propuestas concretas: Pena de muerte para los secuestradores y que el gobierno absorba los costos del desabasto de medicinas o la mala calidad de la educación.
Esos son los elementos que conforman una campaña exitosa, lo demás es carne de cañón para que los medios de comunicación se entretengan, sólo eso