Desde el inicio del presente proceso electoral, en octubre del año pasado y hasta la fecha, un total de 21 personas han perdido la vida en situaciones de violencia, relacionadas con un partido u organización política.
La lista incluye a precandidatos y candidatos a un puesto de elección popular, coordinadores de campaña, funcionarios o exfuncionarios, militantes, familiares o acompañantes de las víctimas.
El caso más reciente es el de Miguel Ángel Luna Munguía, candidato a diputado federal por el Distrito 32, del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Valle de Chalco, Estado de México, ocurrido el pasado 2 de junio.
La noche del 27 de mayo, Israel Hernández Fabela, coordinador de campaña de la candidata del PRI a diputada local por el Distrito 3 de Azcapotzalco, Aída Beltrán Sánchez, fue asesinado en la cochera de su casa, en la colonia Petrolera de esa demarcación.
En Puebla, el pasado 26 de mayo, asesinaron a José Salvador Méndez Morales, coordinador de campaña de Lorenzo Rivera Sosa, candidato del PRI a diputado federal, cuando platicaba con un hombre afuera de las oficinas partidistas, en la capital del estado.
Jehová de la Cruz Gallegos, excoordinador de la Unión Campesina Oaxaqueña (UCO) y afiliado al Partido del Trabajo (PT), fue asesinado el 20 de mayo cuando salía de un velorio, en la colonia 19 de Marzo de Juchitán de Zaragoza, en la región del Istmo, en Oaxaca.
Un caso que llamó la atención a escala nacional fue el de Enrique Hernández Salcedo, candidato del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) a la presidencia municipal de Yurécuaro, Michoacán, asesinado el 14 de mayo.
El líder de un grupo de autodefensas fue asesinado luego de realizar un acto de campaña y las investigaciones llevaron a la detención de tres mandos de la Policía Municipal como presuntos responsables.
Ese mismo día, pero en el poblado de Mecatepec, municipio de Huimanguillo, Tabasco, fue asesinado Héctor López Cruz, candidato a regidor del PRI; fue ejecutado con 16 tiros de arma larga, tras repartir propaganda.
El 1 de mayo fue asesinado en Chilapa, Guerrero, Ulises Fabián Quiroz, candidato del PRI-PVEM a la presidencia municipal en la comunidad de Atzacoaloya, cuando se dirigía a un acto de campaña.
Los cuerpos sin vida de Martín Alonso Colmenero Ledezma y Francisco Javier Aguilar Siller, integrantes de la Secretaría de Acción Juvenil del PAN, en Chihuahua, fueron localizados en un paraje de la capital del estado, el pasado 21 de marzo.
Aidé Nava González, precandidata el PRD a la alcaldía de Ahuacuotzingo, Guerrero, fue privada de su libertad el 7 de marzo y cinco días después su cuerpo fue encontrado con marcas de tortura, disparos y desprendida su cabeza.
La lista incluye a los panistas Alfredo Ordaz Mendoza, operador en San Luis Potosí, y al ex regidor de Acapulco, Guerrero, Guillermo Cisneros Chegüe; y el 6 de noviembre del año pasado había sido asesinado su hermano César Cisneros Chegüe.
El 17 de febrero, Carlos Martínez Villavicencio, precandidato del PRD a la diputación federal por el distrito de Tlaxiaco, Oaxaca, y dos personas más fueron asesinados en una emboscada.
Roberto Flores Vizcaíno, empresario inmobiliario y exdirigente del PAN en Morelia, Michoacán, fue asesinado el pasado 27 de enero en la zona residencial de La Loma de Santa María, en esa ciudad.
En la agencia de Brama Paraje Pérez, perteneciente al municipio de Santiago Juxtlahuaca, Oaxaca, ejecutaron a Julián González Domínguez, dirigente local de Morena, el 12 de enero del presente año.