Durante el debate celebrado ayer entre Jesús Vizcarra Calderón -PRI, PVEM y Nueva Alianza- y Mario López Valdez -PAN, PRD y Convergencia-, candidatos al gobierno de Sinaloa, la sombra del narcotráfico fue el tema central.
López Valdez, Malova, cuestionó abiertamente a Vizcarra Calderón si es compadre del narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada, pregunta que el priísta respondió diciendo que nunca ha hecho nada ilegal.
“Nunca en mi vida he hecho lo más mínimo fuera de la ley y de lo que debe ser, pueden estar seguros”, aseguró Vizcarra dirigiéndose a los sinaloenses.
Por su parte, Jesús Vizcarra acusó a Genaro García, quien fuera secretario de Seguridad Pública de Malova durante su gestión como alcalde de Ahome -2002 a 2004-, de haber protegido a narcomenudistas, argumento que el priísta apoyó con recortes de periódicos locales.
Vizcarra afirmó que gracias a esa supuesta protección de funcionarios públicos hacia los vendedores de drogas al menudeo, en Los Mochis -cabecera municipal de Ahome- se desató una violencia “imparable”.
En lo que se refiere a propuestas, Vizcarra prometió impulsar el sector alimentario, turismo, nuevas tecnologías, empresas y emprendedores. Mientras que Malova centró su discurso en la atención a la pobreza y la inseguridad que actualmente predomina en el estado.
En un momento del encuentro realizado en el Hotel Lucerna, ubicado en Culiacán, Vizcarra calificó a Malova como ignorante, al asegurar que el representante de la coalición opositora “ni siquiera sabe el número de habitantes de Sinaloa”.
Anteriormente, a Vizcarra Calderón se le ha señalado por tener parentesco con el narcotraficante finado José Inés Calderón Quintero, relación que el priísta se ha negado a reconocer públicamente.
El encuentro de ayer fue el segundo y último debate que organiza el Consejo Estatal Electoral (CEE) entre ambos candidatos, a quienes a partir de ahora les quedan 14 días de campaña proselitista de cara a las elecciones que se realizarán el próximo 4 de julio.