Diplomáticos europeos y británicos mantenían este lunes en Bruselas “intensas” y “cruciales” discusiones para alcanzar un acuerdo sobre los pedidos de reforma de la Unión Europea (UE) por parte de Londres para que Gran Bretaña permanezca dentro del bloque.
El primer ministro británico, David Cameron, y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, no alcanzaron un acuerdo el domingo por la noche en Londres y decidieron extender las negociaciones por 24 horas.
De momento sólo se alcanzó un acuerdo, según una fuente europea, sobre uno de los cuatro puntos de reforma que pide Cameron, presionado en su país por los euroescépticos de su propio partido y los eurófobos del UKIP.
Cameron prometió organizar una consulta en su país sobre la permanencia de Gran Bretaña en la UE, pero para sosegar a los escépticos se lanzó en una cruzada para que sus 27 socios del bloque europeo acepten reformas en los tratados.
El domingo, Tusk -que representa a los 28 miembros de la UE y tiene mandato para negociar- prometió un “trabajo intensivo en las próximas 24 horas” y estimó la secuencia como “crucial”. Cameron quiere obtener un acuerdo con sus socios en la cumbre del 18 y 19 de febrero.
En tanto, un portavoz de Cameron estimó el domingo por la noche que se lograron “numerosos progresos” desde el viernes, cuando el primer ministro británico almorzó con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker en Bruselas. “Deberemos trabajar más”, insistió.
Este lunes por la mañana una fuente europea indicó que “las negociaciones continúan”.