Proteger a los más vulnerables, en especial a los niños, es y seguirá siendo una prioridad para el Gobierno de la Nueva Visión, destacó la secretaria de Salud, Vesta Richardson López Collada, al encabezar la Segunda Sesión del Consejo Estatal para la Prevención del Cáncer en la Infancia y la Adolescencia.
En las instalaciones del Hospital del Niño Morelense en Cuernavaca, y en presencia del director José Alejandro Ramos Rodríguez, así como de oncólogos, y hematólogos pediatras, trabajadoras sociales, voluntarias, Vesta Richardson los convocó a seguir impulsando más proyectos que coadyuven a salvaguardar la integridad de los niños morelenses, y no bajar la guardia ante este reto.
Destacó que derivado del trabajo que se ha hecho en la materia, actualmente Morelos destaca a nivel nacional con las cifras de atención a este sector vulnerable, en el que se da servicio a 284 niños, de los cuales 80 están en tratamiento y 204 están en vigilancia, de estos últimos 79 están cubiertos por gastos catastróficos que da el Seguro Popular, además de que se tiene sobrevida, baja tasa de mortalidad y baja tasa de abandono.
El objetivo y por lo que estarán trabajando en los subsecuentes días, resaltó la secretaria de Salud, será que los niños entren a un registro oficial donde se pueda dar seguimiento de cómo se encuentran, si están en tratamiento activo o viene la consulta externa de seguimiento, a fin de evaluar periódicamente cómo va el programa, considerado uno de los mejores en el estado.
Vesta Richardson se comprometió a ubicar a Morelos con un trabajo conjunto, dentro de los tres primeros lugares en supervivencia nacional en cáncer en niños, así como seguir llevando un registro con excelencia para analizar la información y con base a ello, proponer mejoras en los planes de tratamiento en seguimiento de los niños, medidas de trabajo social para que no dejen el tratamiento, ayudando a los niños y lograr un plano de excelencia.
Por separado, el director del Hospital del Niño Morelense, José Alejandro Ramos, acordó trabajar de la mano, a fin de lograr que los niños morelenses tengan mejores condiciones de vida y puedan sobresalir.