Durante el periodo comprendido en 2008-2009 dos soldados de origen israeli obligaron a un nino palestino a abrir algunas bolsas de contenido sospechoso, mientras participaban el a operacion conocida como “Plomo Fundido” en la Franja de Gaza.
Razones por las que un tribunal militar ha decidido condenar a los dos soldados que participaron en los incidentes. Los cargos formales son conducta inapropiada y abuso de autoridad, asi como un nuevo cargo llamado del procedimiento del vecino, denominacion empleada por el Ejercito israeli para el empleo de escudos humanos durante registros y persecuciones, una tactica expresamente prohibida.
Al finalizar el juicio, ambos procesados manifestaron sentirse traicionados por el ejercito, mientras que algunos otros soldados demostraban apoyo a sus companeros fuera de la sala y dijeron que eran victimas de las presiones que la ONU ha puesto sobre Israel, ante el trato de esta nacion a los palestinos