Unas quinientas personas se concentraron hoy en Madrid ante la sede del Tribunal Constitucional (TC) para pedir la suspensión de la nueva ley del aborto, que entrará en vigor el próximo lunes y que permite la interrupción del embarazo hasta la decimocuarta semana de gestación.
Convocados por 70 asociaciones contrarias al aborto, los manifestantes, medio millar según cálculos de la Policía, pidieron al Gobierno que paralice la entrada en vigor de esta ley hasta que el Alto Tribunal decida sobre el recurso de inconstitucionalidad presentado por el opositor Partido Popular (PP) .
El objetivo de la concentración fue, según los convocantes, pedir apoyo institucional para las mujeres embarazadas, exigir al Ejecutivo que “no instrumentalice la escuela al servicio de su peculiar y perversa ideología sobre la sexualidad” , y pedir a los políticos que “los derechos humanos no sean nunca cuestionados” .
La presidenta de la Federación Española de Asociaciones Provida, Alicia Latorre, cerró el acto asegurando que el Tribunal Constitucional suspenderá esta norma y la declarará inconstitucional porque en la Carta Magna, dijo, “no pueden caber la tortura, el trato vejatorio, ni la desigualdad de oportunidades” .
La nueva ley del aborto permite la interrupción libre del embarazo hasta la semana 14 de gestación y hasta la semana 22 cuando se diagnostiquen enfermedades extremadamente graves e incurables para el feto.
La norma también establece que las menores de 16 y 17 años no necesitan consentimiento paterno para abortar, aunque tendrán que presentar un documento en el que acrediten que han informado a sus progenitores, salvo que aleguen riesgos de conflicto grave.
El médico deberá apreciar por escrito y con la firma de la mujer que dichas alegaciones son fundadas y, para ello, podrá pedir un informe de un psiquiatra o de un trabajador social.