Ok.
Un comité de seguridad del senado norteamericano tiene en su poder información sobre una supuesta carrera armamentista entre carteles de la droga en México.
Así como ven, lo que sucede es que aun cuando el plan Mérida sigue adelante; el tráfico de armas ha crecido alarmantemente.
Les creo, hemos visto últimamente que las bandas delictivas presentan traer cada vez más armas un poco más sofisticadas que en el pasado.
Lanzagranadas, armas automáticas, rifles de asalto, granadas y algunos mencionan que ya misiles tierra aire.
De hecho ya escribí sobre que Estados Unidos estaba preocupado sobre la información de que un cartel de la droga en México tenía en su poder misiles tierra aire SAM-7 de los sobrantes de las guerrillas centroamericanas.
El peligro o el pensar era que efectivamente fueran usados no para combatir a sus símiles sino también para en un arrebato de coraje y odio contra el helicóptero o avión de alguna autoridad mexicana.
Vale.
Esto cada vez esta preocupando mas.
Y es que teniendo cada vez mejores armas que las propias autoridades federales la lucha contra la delincuencia organizada será más desigual y podría no seguir dando frutos.
De hecho, ya lo hemos visto, como grupos de soldados se han enfrentado en tiroteos y balaceras dignas de películas de guerra utilizando sub ametralladoras en vehículos artillados y con granadas a células del narcotráfico en Michoacán o Sinaloa, últimamente río bravo y estos reductos de grupos delictivos contienen y resisten los ataques por varios minutos en ocasiones un par de horas.
Es entendible entonces la situación que se vive entre algunos mandos militares y policíacos, pero también de congresistas norteamericanos ante el fenómeno de carrera armamentista en el país.
¿De acuerdo?