Por su seguridad y para el bien de México”, el Frente Nacional Anti-AMLO (FRENAAA), decidió levantar provisionalmente el campamento por la libertad y la justicia que mantenía en el Zócalo de la Ciudad de México desde el pasado 19 de septiembre.
En un comunicado de prensa, dio a conocer que la creciente violencia de los “reventadores” pagados por el gobierno para amedrentar y provocar a los ciudadanos no-violentos del campamento FRENAAA, fue creciendo “al punto que nos vimos obligados a solicitar, hace más de tres semanas, a la ONU y la OEA que enviaran observadores internacionales”.
Destacó que habiendo tomado conocimiento de futuras acciones similares que estaban planificándose, a través de la compra de lealtades, la extorsión, las amenazas y otros deplorables métodos “propios de esta dictadura chavista en ciernes, decidimos no exponer a uno solo más de los miembros de FRENAAA, concentrarnos en la convocatoria multitudinaria para el próximo sábado 21 de noviembre a las 10 de la mañana en el Monumento a la Revolución”.