Usted dígame ya que quizá y aquí hay que entender y poner un poco más de atención que en otros escritos o dichos, pero sucede que el dirigente nacional del PAN, Gustavo Madero acusa al PRI de que “agarró aire” para seguir con el autoritarismo, que le caracteriza de hace décadas.
Lo digo ya que Gustavo Madero parece que no está con Dios ni con el Diablo, pero simplemente demuele su partido, amenaza y toma de rehén al Pacto por México, amedrenta a todos señalando la paja en el ojo ajeno pero jamás logra ver la viga que tiene en el propio y además, parece que se hace el chistoso ya que si ha ganado tiempo no es gracias a los propios panistas que ha atacado y ha mostrado que n tiene nada que hacer, sino de Enrique Peña Nieto que en el Pacto por México le ha dado juego con legisladores y gobernadores panistas, sino, el propio Gustavo Madero no tendría nada que hacer.
Usted dígame, ¿vale el señalamiento? Para mí no, no porque el PRI no este demostrando con casos muy claros que siga siendo la basura que siempre ha sido, sino porque Gustavo Madero no es un interlocutor válido para hacer estos señalamientos.