Javier Duarte gobernador de Veracruz dicen quienes le tienen en estima (que apropósito, cada vez son menos) le ven de unos días a la fecha un poco nervioso, como que no se encuentra concentrado en lo que hace y que además, está viendo la forma en poder esquivar las balas de la prensa que le habla sobre la violencia que está teniendo una escalada en su estado.
En Veracruz sabe Javier Duarte que los 90 muertos este año con motivo del crimen organizo son solo los que la gente de su fiscalía, liga por sus características al morir, con el flagelo del narcotrafico, pero que no solo son 90, hay una cifra negra que en el momento en el que se sepa sencillamente los cálculos se van incrementar en todos los sentidos.
Este año ha sido particularmente complicado para Veracruz, se comenta en las calles y las redes sociales que el cartel del narcotrafico los Zetas viene a recuperar ciertas plazas y que por el golpeteo que recibieron en el sexenio pasado e inicios de este, fueron viéndose disminuidos.
La cuenca del golfo siempre ha sido para los carteles del narcotrafico una buena fuente de ingresos, lo decimos ya que Tabasco, Veracruz y Tamaulipas son una buena ruta de droga rumbo a los Estados Unidos, son estados donde tienen muchas posibilidades de robo de combustible y por si fuera poco, es ruta de migrantes que van a los Estados Unidos.
Tienen negocios redondos en estos estados.
Por lo mientras Javier Duarte sabe que Veracruz está en la mira de varios medios y que la prensa no está con el, por sus tratos a los medios, Veracruz está tranquilo pero esta tensa calma en cualquier momento puede desaparecer y claro, Javier Duarte lo sabe y por ello esta pensativo y nervioso.