La Arquidiócesis de México difundió la “Oración por el bien común”, en la que pide ayuda divina para que la feligresía tome las decisiones que contribuyan al desarrollo social.
Pidió a Santa María que proteja y ayude a los “políticos electos” pues la sociedad les convoca a “rescatarla de amenazas y sufrimientos”.
En la oración de cuatro párrafos difundida a través del Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (Siame), solicitan la intervención divina para que, pese a las limitaciones de la feligresía, los instruya para que sean “dignos ciudadanos”.
“Santa María, madre de Dios y del pueblo mexicano, mira con bondad nuestras limitaciones e instrúyenos para que seamos dignos ciudadanos; auxílianos para que nuestras decisiones contribuyan al desarrollo de tus hijos amados”, dice la plegaria.
“Permítenos ser honorables instrumentos de la fe de un pueblo adolorido, ilumina nuestros pasos hacia un nuevo compromiso para hacer posible el Reino del Señor en esta tierra”, menciona el rezo que divulgó la arquidiócesis que encabeza el cardenal Norberto Rivera Carrera,
Este mediodía, el también arzobispo primado de México enfocó su homilía en un mensaje religioso. No hizo ninguna referencia al proceso electoral.
En el semanario “Desde la fe” no se publicó el tradicional editorial en que la Arquidiócesis de México fija su postura sobre diversos temas como el aborto, eutanasia, narcotráfico o el voto nulo.
José de Jesús Aguilar, encargado de Radio y Televisión de la Arquidiócesis, dijo que se acordó no publicar el editorial para expresar el respeto a las instituciones electorales.
Aseguró que la postura del cardenal Rivera Carrera ha sido de no interferir en el proceso electoral.
“Ha sido muy claro (el cardenal), la iglesia no tiene ningún candidato en particular ni apoya a ningún partido, la iglesia es apartidista”, expresó.
En la “Oración por el bien común” se menciona que “para que no sólo crezca el país en lo tangible y material sino en sus corazones, el amor, la verdad y la moral, que son los únicos caminos de la justicia y la paz y a los que, por ser hijos de Dios, tenemos derecho”