Un juez federal en Texas se negó a levantar el bloqueo temporal al plan migratorio del presidente Barack Obama que desde la Casa Blanca actuo para diferir la deportación de hasta cinco millones de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos.
El juez Andrew Hanen rechazó la solicitud hecha por el gobierno federal de levantar su decisión del pasado 16 de febrero, la cual otorgó una orden preliminar para bloquear la acción ejecutiva emitida por el Presidente Barack Obama. Hanen indicó que el gobierno nacional no ha mostrado “ninguna razón creíble” por la cual la orden necesita ser puesta en funcionamiento de inmediato.
Texas y otros 25 estados del país, la mayoría con gobiernos Republicanos, demandaron ante cortes federales para detener la medida de Obama, asegurando que la misma extralimitaba su poder constitucional y los obligaría a gastar más en seguridad pública, salud y educación.
“No hay una necesidad urgente para este programa. De haber tal necesidad (el Departamento de Seguridad Nacional) lo hubiera implementado en cualquier momento en los últimos cinco o diez años”, indicó Hanen en su decisión. El juez también señaló que la administración central lo engañó cuando dijo el mes pasado que había dado permisos expandidos de trabajos a unos 100.000 trabajadores sin documentos antes de que la corte bloqueara el inicio del programa, y pidió más información al respecto antes del 21 de abril.
En noviembre de 2014 el Presidente Obama firmó una acción ejecutiva que le daría ciertos beneficios a padres de ciudadanos estadounidenses o residentes legales que tuvieran varios años en el país, al tiempo que ordenó la extensión de un programa similar para los inmigrantes indocumentados llegados al país cuando eran menores de edad.