abuso a prisioneros
Un juez de Estados Unidos ordenó al gobierno difundir unas fotos que muestran abuso a prisioneros en Irak y Afganistán, en un nuevo capítulo de una saga judicial que comenzó en 2004.
En un mandato emitido en Nueva York el viernes, el juez federal de Estados Unidos, Alvin Hellerstein, le dio al gobierno dos meses para decidir como responderá a esta orden antes de que las fotos sean divulgadas.
El caso fue presentado por La Unión por la Defensa de las Libertades Civiles de Estados Unidos (ACLU) que argumenta que la difusión de las fotos de abuso a prisioneros es necesaria para “el debate nacional sobre la responsabilidad del gobierno en materia de abuso a los prisioneros”.
El gobierno de Estados Unidos se ha opuesto a divulgar las imágenes argumentando que podrían provocar una reacción violenta y colocar en alto riesgo de ataque a las fuerzas y al personal estadounidense en otros países.
En 2004 fueron divulgadas unas fotos en las que se veía a abuso a prisioneros iraquíes maltratados y humillados por militares estadounidenses en la prisión de Abu Ghraib, en Bagdad. Las imágenes dieron la vuelta al mundo y provocaron un escándalo.
Entre 2004 y 2006, 11 soldados -incluyendo a Lynndie England, quien es visto sonriendo detrás de prisioneros sometidos a abuso sexual- fueron condenados por estos hechos en cortes marciales.
Desde hace años la ACLU busca que se publiquen este tipo de fotografías, pero en 2009 el Congreso aprobó la Ley de protección para los documentos de seguridad nacional, que permite al secretario de defensa de Estados Unidos impedir la difusión de documentos que podrían poner en peligro al personal nacional.
De cualquier manera, en el mandato del viernes, Hellerstein dijo que el gobierno de Estados Unidos ha ofrecido justificaciones insuficientes para intentar detener la publicación de las fotos, de acuerdo a la ley de 2009.
“Me parece que la certificación sigue siendo deficiente porque no está lo suficientemente individualizada y no establece la tesis de la secretaría para concluir que su publicación podría poner en peligro a los estadounidenses”, escribió Hellerstein.
El mandato evaluó la publicación de unas 2.000 fotos según la ACLU. El exacto contenido de las imágenes es desconocido, pero un informe del gobierno presentado antes en el tribunal dijo que varias fotos mostraban a “soldados apuntando pistolas o rifles a las cabezas de detenidos encapuchados o esposados”.
El director de la ACLU, Jameel Jaffer, saludó la orden emitida el viernes. “Las fotos son cruciales para el conocimiento público”, comentó. “El razonamiento de la administración de Obama para impedir la liberación de las fotos es ilegítimo y peligroso”, prosiguió.
“Permitir al gobierno que oculte cualquier imagen que pueda provocar violencia contra alguien, en cualquier lugar, puede dar poder al gobierno para ocultar evidencias sobre las malas conductas de sus propios funcionarios”, opinó.
El portavoz del Pentágono, el teniente coronel Myles Caggins dijo que el Departamento de Defensa estaba “estudiando el mandato del juez y hará las respuestas adicionales a través de los documentos en los tribunales”.