La ropa interior es centro de una exposición en museo londinense. Una nueva muestra explora la evolución de la ropa interior desde el siglo XVIII hasta el presente a través de prendas clásicas como el calzoncillo largo o el corset hasta atrevidos diseños modernos.
El museo Victoria y Alberto (V&A) alberga la muestra “Desvestido: Una breve historia de la ropa interior”, con prendas únicas como la bombacha de 1810 que usó la madre de la reina Victoria de Inglaterra (1819-1901), hasta el apretado corset de apenas 45 centímetros de ancho.
A través de 200 prendas de hombre y mujer la exposición exalta la innovación y lujo de la ropa íntima hecha con exquisitos materiales y fibras naturales como seda, encajes, lana y algodón.
La curadora de la muestra, Edwina Ehrman, señaló este miércoles que “nuestros ancestros usaban la ropa interior como una forma de higiene y comodidad y posteriormente para moldear el cuerpo a través de corsets”.
Una de las prendas más evocativas es sin duda el incómodo corset de apenas 45 centímetros de ancho para moldear una diminuta cintura femenina.
Entre la muestra se encuentra otro corset de 1760, encontrado en el pueblo costero de Whitby, en el noreste de Inglaterra, hecho a base de varilla de ballena y con relleno de lana para darle más comodidad al cuerpo.
Una rara pieza es el “petticoat” o fondo de 1770 que se usaba para darle volumen a los vestidos de las damas de esa época, un símbolo de estatus social y distinción.
La tecnología evolucionó a través de los años, los textiles se modificaron y los diseños cambiaron para diseñar ropa íntima más cómoda y producida a gran escala.
Una de las estrellas de la muestra es el nacimiento del brasier, indispensable en cualquier guardarropa femenino, que surgió en 1904-1905.
En 1928 la casa de diseño Roussel de París introdujo el brasier tejido como una variante a esta indispensable prenda íntima.
La muestra presenta la parte reveladora, íntima y erótica pero también funcional de la ropa interior.
Una de las vitrinas alberga prendas antiguas y modernas usadas durante la maternidad y la lactancia, mientras que otro escaparate presenta la evolución del calzoncillo largo de hombre a diminutas truzas de algodón.
El museo de artes decorativas más grande del mundo presenta la influencia de las prendas íntimas en los grandes diseñadores de la moda como Alexander McQueen y Dolce & Gabbana.
Asimismo, se pueden apreciar algunos vestidos utilizados por la modelo británica Kate Moss y la actriz estadunidense Gwyneth Paltrow.
Las crinolinas, corsets, boxers, bras, lencería y medias recobran su lugar en la historia del mundo de la moda como un elemento práctico, íntimo y evocativo a través de esta muestra que abre al público este fin de semana.