La balacera que se sucito en el paradisiaco puerto de Acapulco en días pasados no tiene otra correspondencia mas que el de haber mostrado la virulencia del crimen organizado.
Hablemos claro.
Este problema no se terminara ni en un día o dos, un mes o un sexenio, me deja pensando que en el futuro gobierno espero exista el mismo compromiso que en estar batallando contra bandas de narcotráfico, secuestradores, robo de autos así como trata de blancas o tráfico de personas que actualmente se tiene para lo que es en la actual administración.
Claro, hablar de esto en tiempos electorales es complicado, ya que pareciera que estoy a favor o no del partido en el poder, cuestión que quienes me leen con detenimiento y de forma asidua, simplemente se darán cuenta es falso.
En este espacio no hay inclinación partidista alguna, quien así lo crea, no me ha leído en los últimos 4 años casi 5.
Así que, con un saldo de 15 maleantes muertos, 1 soldado caído en el cumplimiento del deber y tres policías ministeriales “rescatados” en el interior de la propiedad donde se origino todo esto, el combate al crimen organizado, sigue siendo una prioridad en el país.