Cuando tenía 17 años, alguien colgó un video suyo en YouTube titulado “la mujer más fea del mundo”. Un día después de su cumpleaños 26, Lizzie Velásquez celebra su infatigable lucha contra el bullying con el estreno de un documental sobre su vida.
“A Brave Heart: The Lizzie Velasquez Story”, dirigido por la debutante Sara Bordo, se estrena el sábado en el Paramount Theatre de Austin, Texas, como parte del festival de música, cine y tecnología interactiva South by Southwest. La película además se exhibirá el 16 y el 19 de este mes.
El largometraje cuenta la historia de Lizzie Velásquez, una descendiente de inmigrantes mexicanos que nació con una rara enfermedad que le impide subir de peso. El estreno representa un retorno triunfal al lugar donde nació y reside, y donde se hizo famosa en diciembre de 2013 cuando su “TED Talk” se convirtió en un éxito viral.
“Es un gran honor estrenar la película en Austin, que ha sido tan buena conmigo”, dijo Lizzie Velásquez en inglés en una entrevista telefónica reciente con The Associated Press. “Hace poco estuve en Barcelona, hablé con muchas víctimas y confirmé lo que siempre sospeché: que el bullying es algo universal, y por eso hoy estoy con más determinación que nunca para acabar con esa cosa tan horrible que no sólo destruye a las víctimas, sino a los agresores”.
La película muestra a una infatigable Lizzie Velásquez combatiendo las burlas con un mensaje positivo, pero el momento más revelador es cuando aparece más vulnerable.
En una poderosa escena con el doctor Atul Chopra en Houston, Lizzie Velásquez descubre, por primera vez en su vida, cuál es exactamente el mal que padece: el síndrome progeroide neonatal, o síndrome de Wiedemann-Rautenstrauch, un defecto genético que le impide subir de peso y le afecta los ojos, los huesos y el corazón. El fin de la incertidumbre reafirma su compromiso para utilizar su notoriedad para acabar con el bullying.
“Incluso cuando estoy cansada, sigo adelante porque tengo una gran oportunidad para hacer una diferencia y me lo tomo con gran seriedad”, dijo Velásquez. “Podemos acabar con el bullying si hablamos al respecto y estamos todos juntos”.
En septiembre, Lizzie Velásquez fue a Washington a contar su historia e invitó a todos los congresistas a que apoyen el Safe Schools Improvement Act, un proyecto de ley presentado por la congresista Linda Sánchez (demócrata de California) desde 2009 pero que aún no reúne los votos necesarios de ambos partidos. Hasta el momento, 208 congresistas, en su gran mayoría demócratas, apoyan el proyecto.
“Cuando Lizzie fue a Washington, sólo un congresista fue a escucharla: Linda Sánchez, la autora del proyecto”, dijo Bordo, quien debuta como directora con este documental. “Pero no nos rendimos: en los próximos meses mostraremos la película en el Capitolio y esperamos convencer a más republicanos. Ojalá la película sea un catalizador para que se hable del tema”.
En Estados Unidos no existen leyes federales para identificar, reportar y castigar el bullying. Cada estado tiene sus propias reglas, y algunos estados ni siquiera poseen leyes para evitarlo. El proyecto de ley de Sánchez obligaría a las escuelas que reciben fondos federales a que sus códigos de conducta incluyan lenguaje específico condenando el bullying, a reportar los casos y llevar estadísticas. Además, les permitiría a las escuelas recibir fondos federales para incluir enseñanzas contra el acoso en su currículum.
“Nada de eso existe hoy, pero no estamos tan lejos de la meta”, dijo Sánchez. “Sólo nos faltan 10 votos y lo que ha hecho Lizzie es fantástico: ella tomó algo muy doloroso y lo convirtió en algo positivo. Definitivamente la película puede servir para convencer a mucha gente. Ojalá sea así, porque esta legislación es muy necesaria”.