Luego de que ayer Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray fueran señalados presuntamente de repartir sobornos de Odebrecht, el presidente Andrés Manuel López Obrador encabeza su tradicional “mañanera”.
Lo anterior, luego de que el fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, informara que el ex titular de Pemex, Emilio “L”, acusó al expresidente Enrique Peña Nieto y al ex secretario de Hacienda, Luis Videgaray, de recibir sobornos por más de 100 millones de pesos y ordenar él repartos de éstos a asesores extranjeros que colaboraron en la campaña electoral de 2012.
Más le vale a López Obrador hacer un caso solido contra Peña Nieto y Luis Videgaray sino, su gobierno perderá credibilidad, la poca que le queda.