Hablar del sistema polÃtico mexicano es adentrarse en un enfrentamiento de ideas y personajes, significa hacer un recorrido por los momentos amargos y dulces de la polÃtica.
Tratar de entender el desarrollo de los logros democráticos anhelados por Francisco Ignacio Madero, es contemplar el crecimiento de México durante décadas, su evolución y crecimiento como paÃs, sus héroes y villanos, los grandes lÃderes que han llevado al sistema hasta el punto en que se encuentra.
Pero no podemos entender la maduración de los sagrados anhelos de un Estado democrático, sin mencionar a uno de los grandes actores que durante años han caminado de la mano con la clase polÃtica; los periodistas.
Si analizamos el papel que han jugado los medios de comunicación a lo largo de los grandes acontecimientos del paÃs podemos apreciar que sin su constante participación intentar hablar y descifrar el sistema polÃtico no serÃa posible.
Durante años millones de mexicanos se han enterado de las realidades e impresiones gracias al importantÃsimo trabajo que se realiza dÃa con dÃa en los medios. Vale la pena destacar el ejercicio periodÃstico como una parte medular dentro del mismo sistema polÃtico, en este año de mitos y realidades donde son obligatorias las palabras pronunciadas por el Ejecutivo Federal â??celebrar significa también analizar, celebrar significa discutir la historia de México que no ha sido, afortunadamente, ni de ángeles ni demonios, sino de hombres y mujeres como todos, con virtudes, con defectos, con grandes ideales. Dialoguemos y discutamos sobre la historia nacional sin mitos, sin prejuicios, sin exclusiones.â?
Hoy el papel de la prensa no es igual a los años dorados del viejo sistema donde existÃa una sola regla que se cumplÃa como mandamiento â??no tocarás ni al presidente de la República ni a la Virgen de Guadalupeâ?. Afortunadamente y para el bien del propio sistema contamos con gente como Carmen Aristegui capaz de hacer temblar a las voces más duras de clase polÃtica.
Vemos con valentÃa los cartones de los moneros ; Hernández, Naranjo, Rictus, Alarcón, Helguera, Paco Calderón, Magú, Carreño, Boligán, Jabaz El fisgón y Helioflores.
Prestamos atención a las palabras de Denise Dresser, Macario Schettino, Sergio Aguayo, Enrique Hernández Alcázar, Ricardo Alemán, Jesús Rangel, Martha Lamas, Ana Lilia Pérez, Héctor Aguilar CamÃn, Julio Scherer, Lorenzo Córdova, Sergio Aguayo, José Cárdenas, Sergio Sarmiento, Katia D´artigues, Diego Osorno, Olga Pellicer, Félix Fuentes, Denise Maerker, Julio Hernández, Jairo Calixto, Olga Wornat, Lydia Cacho, Alán Arias, Sabina Berman, Ricardo Raphael, Federico Arreola, JoaquÃn López Doriga, Mardonio Carballo, Thelma Gómez, José Gil Olmos, RosalÃa Vergara, Ernesto Villanueva y el maestro Miguel Ãngel Granados Chapa.
El periodismo es uno de los pistones del motor mexicano, y no podemos entender al sistema y sus fallas sin estos hombres y mujeres, quienes gracias a su esfuerzo y compromiso con la verdad y la â??objetividadâ? demuestran que podemos salir de esta tragicomedia mexicana en la cual vivimos.
Estas lÃneas no son alabanzas a los citados antes, es una crÃtica y un llamado a todo mexicano que posee una pluma y la capacidad de contar la realidad. Es un grito de auxilio pues el trabajo de cada uno de ellos nos llevará a la cita que el paÃs tiene pospuesta con el destino.
DÃa a dÃa su trabajo genera los despertares de la mente, y generan opiniones y debate, de nada sirve que en un único diario se publicaran sus columnas, artÃculos y colaboraciones si nadie las leyera o las escuchara.
El sistema polÃtico mexicano de nada sirve sin ustedes, porque dÃganme quién nos va a contar de los malos manejos del erario, del nepotismo y la impunidad, de los secuestros, la corrupción, desapariciones, el catastrofismo, de los daños colaterales y sus derivados.
Vivimos tiempos obscuros pero aún existe la luz, y ustedes tienen el peso en sus hombros, no olviden qué representa hoy su voz y escritura pues son ustedes quienes a diario cuentan la realidad. El periodismo y el sistema polÃtico son complementos, un Presidente sin micrófono no es legÃtimo, y un periodista sin entrevistador no tiene nota.
Les invito a analizar el papel que hoy juega aquel que tiene el medio para dar su opinión y las repercusiones que esto tiene, esa divinidad llamada ética habrá que pensar en sus dimensiones. Prensa y poder cuánto daño le ha hecho a este paÃs, celebremos el bicentenario y el centenario bajo un solo lema, soñemos en libertad y caminemos a los ideales siempre en aras de la verdad.
* Rodrigo Hernandez Lopez es periodista por destino y fotógrafo