Las mentiras están en todas partes, son parte de la vida cotidiana de todos los seres humanos, quienes segun un estudio cientifico, en promedio mentimos de 3 a 5 veces de forma inconciente al día. Las mentiras en anuncios, revistas, portadas, historias, entrevistas, personas, celebridades, políticos, y casas de más de 7 millones de dólares con salario de actriz de telenovela mexicana esta por todas partes la cuestión es detectarlas.
No hay un elemento qu ayude a detectar en la vida cotidiana las mentiras, pero si podemos detectar las 3 mentiras mas recurrentes del mundo de la publicidad utilizadas con el afan de vender algun producto.
1) Las mentiras de los productos milagro para bajar de peso, son de las mas recurrentes, los infomerciales que se hacen a la usansa de la decada de los 90s en el siglo pasado (que fuerte se lee eso ¿verdad? parece una de las mentiras mas recurrentes, pero los informerciales se pusieron de moda hace dos decadas) demostraban a traves de argumenos ligeros y sin logica pero gran producción televisiva, que las mentiras se pueden vender.
2) A todos les gustan las peliculas romanticas, esa es una de las mentiras mas comunes en el mundo de la publicidad, ya que segun ellos siguen haciendose peliculas ya que a todo el mundo les gusta, mentiras de que al final el amor vence, mentiras de que todos pueden encontrar el amor y mentiras sobre que con un golpe de suerte la mucama de un motel puede llegar a ser potentada gracias al amor de un esposo que le vio y saco de trabajar mostrandole un oficio mejor como el de corredora de bolsa o tenedora de bonos del tesoro.
Y 3) de las mentiras mas usadas en el mundo de la publicidad, es que cualquier empresa baja en promocion sus precios y da el dos por uno ya que piensa en sus consumidores, eso es falso, es una de las mentiras mas recurrentes, ninguna empresa regala dinero sin un fin detras, ni siquiera a acciones beneficas, obtienen recibos deducibles en el fisco, no porque les caiga bien la causa.
Ahora que lo sabe, ya esta menos mal informado, al menos ya es cuestión de usted saber si cae o no en mentiras de la publicidad.