Una roca del espacio exterior se ha convertido en el centro de una disputa muy pedestre sobre quién es su propietario.
El meteorito, del tamaño de una pelota de tenis, cayó a través del techo de un consultorio médico en Virginia al anochecer del 18 de enero, al mismo tiempo que algunos pobladores reportaron haber visto una bola de fuego en el cielo. Perforó el cielorraso de una sala de exámenes y cayó cerca de donde un doctor había estado sentado unos minutos antes.
“Soy la persona con más probabilidades de estar sentada en ese lugar en que cayó”, dijo el doctor Marc Gallini. “Simplemente parece que no me llegó la hora”.
Gallini y su colega Frank Ciampi dijeron que su primer impulso fue entregar el objeto extraterrestre al Instituto Smithsonian, que les ofreció 5.000 dólares a cambio. Pocos días después, lo enviaron al Museo Nacional de Historia Natural del instituto, para que estuviera bajo custodia.
Los médicos, sin embargo, están preocupados porque los propietarios que les alquilan sus oficinas planean reclamar la roca, ya que ésta podría venderse por una buena cantidad de dinero en el mercado de coleccionistas.
Gallini, que tiene su consultorio en Lorton, Virginia, desde 1978, dijo que le avisó al propietario Erol Mutlu de su intención de entregar el objeto extraterrestre al Smithsonian, que tiene la colección más grande del mundo de meteoritos en un museo. Asegura que Mutlu le dio permiso.
Esa misma semana, sin embargo, Mutlu les envió un correo electrónico a los médicos en que avisaba que su hermano y copropietario Deniz Mutlu iba al Smithsonian a recoger la roca, dijo Gallini.
Aunque el médico no mostró el correo a The Associated Press, el diario The Washington Post informó que Erol Mutlu escribió: “Es evidente que la propiedad está vinculada al dueño del edificio”.