México es el segundo país de América Latina más afectado por ataques de ransomware al cierre del primer trimestre de 2024, lo que significa que empresas, gobierno y los usuarios finales deben incrementar mejorar sus métodos de seguridad.
David González, investigador de seguridad informática del Laboratorio de Eset Latinoamérica, recordó que el ransomware era un código malicioso cuyo único objetivo era bloquear (secuestrar) un equipo con el fin de pedir un rescate para liberarlo.
Esto ha evolucionado a tal punto en que existen grupos de cibercriminales que ofrecen el ransomware como un servicio, es decir, venden estas herramientas a través de una suscripción para personas que no son nada técnicas e, incluso, pueden personalizarlas dependiendo de la víctima