La exposición “México fotografiado por Luis Buñuel” se presenta en la 53 edición del Festival Internacional de Cine de Gijón, norte de España, con imágenes de pequeños pueblos y zonas urbanas mexicanas de los años 50 del siglo pasado.
Se trata de 85 imágenes que aparecieron junto a otras casi mil en una caja de zapatos, en un lote de objetos del cineasta Luis Buñuel, nacido en Calanda, noreste español, que la Filmoteca Española había adquirido hace años.
Luis Buñuel, quien murió en México con nacionalidad mexicana, tomó esas fotografías durante las localizaciones de doce de sus películas mexicanas, como “Los olvidados”, “Nazarín” o “El ángel exterminador”.
Uno de los comisarios de la muestra, el director del Centro Luis Buñuel de Calanda, Javier Espada señaló que la exposición demuestra que Buñuel no dejaba nada al azar, que trabajaba muchísimo sus guiones, pero también él mismo localizaba los exteriores de sus películas rodadas en México.
“Al mismo tiempo, dijo, estamos hablando de la mirada de Luis Buñuel, de un gran fotógrafo, y de una faceta que no se conocía”.
Resaltó que los encuadres que él hacía previamente, son los mismos con los que luego se rodaba la película y por eso era tan rápido, sus rodajes resultaban tan baratos y eso le permitía tener una cierta libertad.
Indicó que las fotos las tomaba con una cámara Leica para hacer él mismo la labor de localización de sus películas.
“La selección fue muy complicada porque estamos hablando de unas mil fotografías, tamaño pequeño, no todas estaban muy bien conservadas, pero lo que nos permitió identificarlas fue que coincide perfectamente el encuadre”, apuntó.
“Cuando localizas la fotografía con un fotograma correspondiente, sabes que es ese exactamente porque no hay equívoco posible, pero fue una labor de meses, de estar revisando las fotografías e ir comparando con películas”, abundó.
Luis Buñuel llegó a México en 1946, casi por casualidad, después de haber pasado por una serie de tribulaciones. En un momento en el que se encontraba sin trabajo y sin patria, México le acogió y le ofreció trabajo, lo que le permitió realizar el cine por el que ha sido reconocido internacionalmente.
En México se instaló y residió hasta su muerte en 1983. Entre 1947 y 1965 filmó en territorio mexicano 20 películas y en esta exposición, en Gijón, se encuentran las localizaciones de varias de ellas.
A pesar de no tratarse de fotografías artísticas, se puede afirmar que tienen suficiente calidad como para que en sí mismas constituyan un elemento artístico digno de admirarse.
Sin embargo, su mayor valor radica en aportar claves para conocer mejor la obra de Buñuel y hacer ver aspectos poco conocidos de su trabajo.
En contra de la imagen de descuido en la realización de sus películas que se tiene de el cineasta calandino, estas fotografías ponen de manifiesto lo escrupuloso de su proceso previo al rodaje.