La Confraternidad Nacional de Iglesias Cristianas Evangélicas (Confraternice) pidió la intervención de la PGR para esclarecer el asesinato de 11 personas en Coxcatlán, luego de que su alcalde, Vicente López de la Vega, insistió que el crimen estaría relacionado con diferencias religiosas, pese a que la Fiscalía estatal aseguró que el delito tiene origen en conflictos personales.
A través de una carta, la Iglesia evangélica consideró necesaria también la intervención de la Segob y de la CNDH.
Según la misiva, el presidente de Confraternice, Arturo Farela Gutiérrez, exigió castigo a los culpables del asesinato de 11 integrantes de su congregación, y confió que serán detenidos y presentados ante los tribunales; además rechazó cualquier tipo de violencia en el país.
En este documento, reconoció que hay más tolerancia de la sociedad mayoritariamente católica; sin embargo, dijo que en algunas comunidades todavía hay agresiones contra los cristianos evangélicos.
En su cuenta de Facebook, Farela ofreció al pastor de la zona ayuda espiritual, jurídica y económica, “que es como Dios me ha permitido ayudar por 40 años a muchas comunidades indígenas, especialmente en los estados de Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Veracruz y Jalisco.
Por su parte, el alcalde aseguró que ya se preparan para recibir los cuerpos de los 11 miembros de la familia ultimada en la inspectoría de San José El Mirador.
Además, comentó que el acto religioso de velación se llevará en la parte trasera del palacio municipal, aunque aclaró que será la familia la que determine en dónde serán enterrados.
Asimismo, se dio a conocer que uno de los involucrados en el múltiple homicidio pertenece a la comunidad aledaña de El Potrero.
El pasado viernes en la madrugada, sujetos encapuchados asesinaron a balazos y con arma blanca a cinco hombres, cuatro mujeres y dos niños, además de dejar heridos a otros dos infantes, en una casa de adobe de El Mirador.