Los lineamientos a los que estará sujeta la venta y dispensación de antibióticos, que entrarán en vigor en el mes de agosto próximo, afectarán económicamente a las empresas, porque disminuirá la compra de éstos, consideró Antonio Pascual Feria, presidente de la Asociación de Farmacias de México (Anafarmex).
En conferencia de prensa, reconoció que será difÃcil terminar con una cultura en la que las personas compraban antibióticos sin receta, por lo que no basta con las nuevas normas, sino que se requiere mayor orientación, información y convencimiento para los consumidores.
Pascual mencionó que de todos los medicamentos que hay en el mercado, para 30% de ellos, de acuerdo con la ley, no se requiere receta médica, los cuales se denominan de libre acceso y ahà es donde hay una mayor práctica de automedicación.
â??El otro 70% está dentro de grupos donde tiene que presentarse la receta para su venta y puedo asegurar que la mayorÃa de los antibióticos, que se comercializan en las farmacias de este paÃs, se obtienen a través de receta médica, pero hay un rango entre un 10% de ellos que se están adquiriendo actualmente sin la receta médica y aquà es donde vamos a colaborar para regularizar su manejoâ?, dijo.
De ahÃ, que Pascual Feria resaltó que los farmacéuticos trabajan a marchas forzadas para cumplir con los lineamientos, entre los que destaca la obligación de la prescripción señalando el genérico, lo cual es una polÃtica federal que se ha impulsado para el beneficio de los usuarios y más ahora que se ha completado el prepeso de la regularización de todos los genéricos para que sean intercambiables.
Se debe precisar en las recetas cuántas pastillas o cuántos dÃas el paciente va a tomar el medicamento, para que esto le permita resurtir la receta, dos, tres o cuatro veces más.
Los lineamientos obligarán a las farmacias, entre otras cosas, a llevar un registro en el que se detalle la fecha de adquisición, de venta, dispensación o desechamiento del antibiótico; asà como la denominación distintiva del mismo o genérica en caso de ser necesario; también especificar la presentación del medicamento y la cantidad adquirida, vendida, dispensada o desechada.
Además, el nombre del que prescribe la receta, número de cédula profesional y domicilio, esto aplicará cuando no sea retenida la misma. Con ello, cada vez que se surta el antibiótico, deberá sellarse la receta indicando en ella la cantidad vendida y la fecha de la venta.
Al momento de que se agote la cantidad del medicamento que fue prescrito por el médico, el establecimiento deberá retener la receta y surtirse únicamente dentro del tiempo de duración del tratamiento indicado