Las personas cambian según cumplen años, dijo el presidente Barack Obama, que reconoció que cada vez se vuelve más cascarrabias. “La semana entrante promulgaré una orden ejecutiva para que no me fastidien”, bromeó Obama.
El presidente de Estados Unidos Barack Obama, al que ya han salido canas, habló el sábado por la noche durante la cena anual del Club y Fundación Gridiron.
Obama hizo un chiste sobre sí mismo: “Hace unos años no podía imaginarme cincuentón. Dadas mis tasas de aprobación, todavía no puedo hacerlo”, al igual que personalidades en el gobierno y la prensa del sector.
Cuando Barack Obama contó su rutina matinal para ponerse de pie suscitó la risa de una audiencia de más de 650 periodistas, legisladores, funcionarios, oficiales militares, entre otros, durante la 130ma reunión de Gridiron. Por tradición, las importantes personalidades políticas dejaron de lado sus diferencias para disfrutar una noche de risas, socialización y recaudación con fines caritativos.
Ante las mofas del presidente a nombre de su gobierno, los gobernadores Scott Walker, de Wisconsin, y Terry McAuliffe, de Virginia, agudizaron su ingenio en representación de los republicanos y demócratas respectivamente.
Walker considera optar a la candidatura presidencial republicana en tanto que McAuliffe tiene ampliadas sus responsabilidades debido a sus conexiones políticas como presidente del Partido Demócrata y aliado de Bill y Hillary Rodham Clinton.
Después de destacar que Walker había dicho recientemente que no podía decir si Barack Obama era cristiano, el presidente informó que su religión enseña el perdón y dijo en broma: “Así pues, gobernador Walker, salaam alaikum” (un saludo en árabe).
Barack Obama dijo que en lo general le agrada John Boehner, el presidente de la Cámara de Representantes. Dijo que los republicanos descontentos en esa instancia legislativa planeaba una rebelión, “o como dice el comentarista político Bill O’Reilly `informando desde la zona de guerra'”.
El Club y Fundación Gridiron, fundado en 1885, ha contado en su cena anual, al menos una vez, con todos los presidentes, desde Grover Cleveland. Para Obama es su tercera visita tras las cenas de 2011 y 2013.
El número de miembros activos en el Club y Fundación Gridiron está limitado a 65 periodistas que reportan desde Washington. El dinero recaudado durante la cena se destina a becas universitarias y organizaciones periodísticas.