SÃ, está bien: Mauricio Fernández, alcalde de San Pedro, Nuevo León, ha disuelto su â??grupo rudo de limpiezaâ?.
Y sÃ, supongamos, no violaron la ley; bajaron el crimen (algo que deberá demostrarse con números porque no se ve asÃ: toda la semana se registró actividad criminal en el municipio, con varios muertos)…
… pero bueno, compremos la inaudita versión de que le funcionaron sus rudos y que, como cumplieron su misión, ya fueron disueltos.
Yo pregunto, reflexiono o me cuestiono, ¿Y a dónde se fueron?
Esos entrenados para enfrentar a las lacras sociales, ¿están ahora dentro del gobierno local? ¿En la policÃa, en comercio, en catastro? ¿Atienden ventanillas? ¿A qué oficina se les envió?
No los habrá dejado libres, sin empleo, ¿o s�
Porque según las autoridades (y Fernández lo sabrá), las filas de los cárteles están integradas por ex policÃas, ex militares, ex servidores públicos.
¿Los dejaron ir? Si es asÃ, que se cuiden los habitantes del municipio porque, sin sueldo, tendrán que comer de algo, y vestir, y pagarse armas, â??trocasâ? y joyas. que no tendran algún gusto extra.
Y� ¿de dónde creen que sacarán para eso? ¿Se pensó en este pequeño detalle? ¿Quién se lo va a preguntar a Fernández? ¿Gobernación? ¿La SIEDO? ¿El gobernador de Nuevo León? ¿El PAN, su partido? ¿Quién?
El Enigma
Analista consultor en riesgos financieros y económicos, editor en jefe de Solo-Opiniones