Beatriz González RubÃn
Empezamos la semana con el retoño de Peña Nieto, que intentando defender a su papa retuiteo un mensaje de su novio en donde nos llamaba elegantemente pendejos y prole. La furia tuitera se desbordó, la cuenta de la chamaca se cerró, para volverse a abrir horas más tarde, esta vez con impecable redacción, ortografÃa y sintaxis. La pregunta fue obvia ¿Qué asesor del señor del copete maneja ahora la cuenta de la niña?
Por otro lado, Cordero muy seguro de sà mismo critica a Peña Nieto y se equivoca llamando Isabel Restrepo a Laura Restrepo. También el señor de los 6,000 pesos tuvo altercados con Josefina Vázquez Mota, ambos se tiraron tierra sin pensar en ningún momento el daño que le hacen a su partido, no utilizó la palabra mentirosa para referirse a ella, pero si mencionó que faltó a la verdad, según yo es lo mismo, pero de manera mas elegante.
Creel por su parte aseguró que en sus debates no utilizará agresiones para sus compañeros pues, argumenta la lucha debe ser limpia, me supongo que el señor sabe que la tiene completamente perdida, en las encuestas va muy por debajo de los otros dos. Tranquilo y sereno siente correr por sus venas atolito de arroz.
El que no podÃa faltar es el â??presidente legitimoâ? López Obrador que muy al estilo de Porfirio DÃaz pretende volver a postularse, pues esta semana obtuvo su registro de pre- candidato presidencial del PT, PRD y Movimiento Ciudadano.
Bueno y qué decir del galán de Televisa Loret de Mola que en su columna “Historias de reportero”, publicada en El Universal, afirma que partidos y candidatos rivales financian la “guerra sucia” contra el priÃsta, situación que generó el célebre Hashtag #MearrastrocmoLoret.
Para finalizar la semana, la naturaleza se encargó de recordarnos cuan débiles somos: un sismo de 6.5 grados sacudió a la ciudad el sábado por la noche. Recuerdos dolorosos y amenazas latentes vinieron a la mente de todos los que vivimos el del 85, los más jóvenes sintieron el rigor de la naturaleza.
Tembló en varios lugares del mundo, tal parece que el planeta nos está diciendo â??bájenle a su relajito o me la voy a cobrarâ?.
El mundo está de cabeza, los polÃticos hacen lo que les da la gana, el narco nos acecha, los ciudadanos comunes y corrientes hacemos lo que nos place, impera la ley del más fuerte.
Me pregunto ¿Estamos a tiempo de hacer algo por nuestro paÃs o por nuestro mundo o estamos condenados a repetir patrones y de esa manera irremediablemente acercarnos a nuestro fin? No por nada los grandes cineastas se han dedicado en los últimos tiempos a hacer pelÃculas post apocalÃpticas.
Tal vez el único consuelo que nos queda es que si este mundo se acaba tal y como lo conocemos, no habrán más â??suspirantesâ? al gobierno que seguramente dejaran peor al paÃs de cómo lo encontraron