Un enorme embotellamiento de tráfico en una carretera china mantiene detenidos a miles de vehÃculos a lo largo de más de 100 kilómetros desde hace nueve dÃas.
La mayor parte de los “atrapados” son camiones que se dirigÃan hacia PekÃn y tuvieron que reducir su paso hasta quedar detenidos como consecuencia del tráfico pesado, las averÃas y las obras.
“Incluso en un paÃs acostumbrado a tener que recurrir a la paciencia ante las congestiones y la masificación, esto es extraordinario”, señalo varios reporteros a sus medios occidentales.
Los choferes se quejaron porque la población de las zonas cercanas a la carretera está aprovechando la situación para cobrarles más de lo habitual por la comida y la bebida.
“TodavÃa no está claro cuándo comenzará a deshacerse la enorme cola. Mientras tanto, los choferes intentan pasar el rato como pueden y se les vio jugando a cartas o al ajedrez en la carretera”, apuntó el reportero.
En los últimos años el crecimiento económico impulsó el desarrollo de las infraestructuras chinas, pero el tráfico aumentó de manera proporcional.
Según un diario estatal chino, las obras que obstruyen el tráfico â??que no terminarán, por lo menos, hasta mediados de septiembre- son necesarias ya que el aumento de la circulación de camiones pesados está dañando las autopistas.
La carretera donde tiene lugar la retención forma parte de la ruta entre PekÃn y TÃbet y por ella transitan cientos de vehÃculos que transportan carbón desde la región de Mongolia Interior