Shirley Manson se despertó el sábado por la mañana, prendió el televisor y vio en un canal de noticias lo ocurrido en Nepal, donde un potente terremoto destruyó buena parte de las ciudades de Katmandú, Bhaktapur y Patan.
La cantante de origen escocés hizo una oración para enviar pensamientos positivos a las familias y a las víctimas nepalíes, y agradeció a la vida por permitirle estar en México, lista para recordar con sus seguidores y compañeros de Garbage 20 años de historia de la banda estadunidense.
“Creo que todos ustedes saben lo que pasó en Nepal hoy, y me siento muy bendecida de estar hoy aquí, a salvo. Me siento muy afortunada y eso hay que recordarlo todos los días, generar y hacer cosas buenas porque el mundo está jodidamente loco”, expresó Manson antes de interpretar la canción Push It, durante su participación en el Festival Pa’l Norte, en el que participó anoche como una de las bandas estelares.
DEL ROJO AL ROSA
Para su actuación en el festival, que se realizó viernes y sábado en el Parque Fundidora de la norteña ciudad de Monterrey, la vocalista cambió su singular cabellera roja por una melena rosa para hacer alusión a la portada del álbum debut con título homónimo que lanzó Garbage hace 20 años, y que se considera uno de los discos más representativos de la década de 1990.
A la par de recordar el lanzamiento de su primer disco del grupo, que también integran los guitarristas Steve Marker, Duke Erikson y el baterista y productor Butch Vig, Manson aprovechó para pedirle a las 70 mil personas que abarrotaron la segunda jornada del Pa’l Norte que le ayudaran a cantar las mañanitas a Eric Avery, bajista de Jane’s Addiction y músico invitado de la agrupación originaria de Wisconsin.