Sinaloa aparece en los indicadores del CONEVAL como un estado que se debate entre la pobreza y la violencia, algo que casi todo México puede intuir al ver imágenes de la entidad.
Por encima de lo que muchos piensan, una cosa acompaña a otra y de esta manera se hace un circulo vicioso que acompaña a la entidad desde hace ya unos años, en los indicadores mas bajos de diferentes rubros que miden la calidad de vida.
Sinaloa tiene una riqueza como estado, que le podria catapultar a los principales lugares de crecimiento, el problema es que al menos en dos administraciones, el dinero no ha fluido como ha debido y claro, la corrupción se ha llevado buena parte de todo hacia bolsillos extraños.
Ademas, la entidad referida tiene enquistada la cuna del narcotrafico y de leyendas de los diversos carteles, que han salido de diferentes localidades de Sinaloa, el caso más conocido es la del Chapo Guzmán, pero a la vez, tenemos figuras de talla internacional buscadas por las principales instituciones de seguridad.
El indicador de pobreza crece al promedio de 29 mil pobres más por año, y pese a ser uno de los principales productores agrícolas, 29.6% de sus habitantes vive en carencia por acceso a la alimentación.
Esto es un caldo de cultivo perfecto para el narcotrafico y el crimen organizado que impera en el estado y sin planes y programas que realmente se bajen por parte de las autoridades estatales, no se ve se revierta.