El reconocido cientÃfico británico Stephen Hawking afirma en un nuevo libro que la fÃsica moderna excluye la posibilidad de que Dios crease el universo.
Del mismo modo que el darwinismo eliminó la necesidad de un creador en el campo de la biologÃa, el conocido astrofÃsico afirma en su obra, de próxima publicación, que las nuevas teorÃas cientÃficas hacen redundante el papel de un creador del universo.
El Big Bang, la gran explosión en el origen del mundo, fue consecuencia inevitable de las leyes de la fÃsica, argumenta Stephen Hawking en su libro.
Hawking renuncia asà a sus opiniones anteriores expresadas en su obra Una Breve Historia del Tiempo, en la que sugerÃa que no habÃa incompatibilidad entre la existencia de un Dios creador y la comprensión cientÃfica del universo.
â??Si llegamos a descubrir una teorÃa completa, serÃa el triunfo definitivo de la razón humana porque entonces conocerÃamos la mente de Diosâ?, escribió Stephen Hawking en aquel libro, publicado en 1988 y rápidamente convertido en un éxito de ventas.
En su nuevo libro, titulado en inglés The Grand Design y que sale a las librerÃas el 9 de septiembre, una semana antes de la visita del Papa a Gran Bretaña, Hawking sostiene que la moderna ciencia no deja lugar a la existencia de un Dios creador del Universo.
En esa obra, escrita con el fÃsico estadounidense Leonard Mlodinow, Hawking rechaza, según un adelanto periodÃstico, la hipótesis de Isaac Newton según la cual el universo no puede haber surgido del caos gracias sólo a las leyes de la naturaleza sino que tuvo que haber intervenido Dios en su creación.
De acuerdo con Hawking, el primer golpe asestado a esa teorÃa fue la observación en 1992 de un planeta que giraba en órbita en torno a una estrella distinta de nuestro Sol.
â??Eso hace que las coincidencias de las condiciones planetarias de nuestro sistema -la feliz combinación de distancia Tierra-Sol y masa solar- sean mucho menos singulares y no tan determinantes como prueba de que la Tierra fue cuidadosamente diseñada (por Dios) para solaz de los humanosâ?, escribe el famoso cientÃfico inglés.
De acuerdo con Hawking, que fue hasta el año pasado profesor de matemáticas de la Universidad de Cambridge, puesto que ocupó en su dÃa el propio Newton, es probable que existan no sólo otros planetas, sino también otros universos, es decir un multiuniverso.
En opinión del reconocido cientÃfico, si la intención de Dios era crear al hombre, entonces esos otros universos serÃan perfectamente redundantes.
El conocido biólogo ateo Richard Dawkins se felicitó de la conclusión a la que parece haber llegado su colega Hawking: â??Es exactamente lo que afirmamos nosotros. No conozco los detalles de la fÃsica, pero es lo que he sospechado siempreâ?, comentó Dawkins.
En su libro, Hawking no excluye la posibilidad de que haya vida también en otros universos y señala que la crÃtica está próxima a elaborar una teorÃa de todo, un marco único capaz de explicar las propiedades de la naturaleza.
Eso es algo, recuerda el diario The Times, que han estado buscando los fÃsicos desde la épica de Einstein, aunque hasta el momento ha sido imposible reconciliar la teorÃa cuántica, que da cuenta del mundo subatómico, con la de la gravedad, que explica la interacción de los objetos a escala cósmica.
Hawking aventura que la llamada teorÃa-M, proposición que unifica las distintas teorÃas de las supercuerdas, podrá conseguir ese objetivo.
â??La teorÃa-M es la teorÃa unificada con la que soñaba Einstein. El hecho de que nosotros, los seres humanos, que somos tan sólo conjuntos de partÃculas fundamentales de la naturaleza, estemos ya tan cerca de comprender las leyes que nos gobiernan y rigen el universo es todo un triunfoâ?, escribe el astrofÃsico.
Hawking da a entender que en lugar de ser una ecuación única, la teorÃa-M puede consistir en â??toda una familiaâ? de teorÃas inscritas en un marco teórico consistente, del mismo modo en que distintos mapas -polÃticos, geográficos, topológicos- pueden referirse a una sola región sin contradecirse entre sÃ