Esto representa un golpe duro para Grupo Elektra y para Ricardo Salinas Pliego, quien ha sido una figura controvertida en el ámbito empresarial mexicano. La decisión de deslistar la empresa puede tener implicaciones importantes, ya que al dejar de ser pública pierde la obligación de informar y transparentar su situación financiera, lo cual puede levantar sospechas sobre posibles prácticas opacas.
Es importante estar atentos a cómo evolucionará la situación de Grupo Elektra y qué impacto tendrá en el mercado financiero mexicano. La salida de la empresa de la BMV puede ser solo el principio de una serie de problemas que enfrentará en el futuro.