El Director Ejecutivo de Apple Tim Cook le ofreció a su amigo y antecesor Steve Jobs una porción de su hígado para intentar salvar su vida, pero Jobs se negó. El hígado a Steve Jobs le habria dado quiza unos meses o par de años de vida, pero el creador de Apple ya estaba tan cansado que deseaba simplemente estar en paz.
En sus últimos días de vida, el fundador de Apple estaba sufriendo de ascitis, un efecto colateral gastroenterológico del cáncer que genera un crecimiento del estómago y requiere un trasplante de hígado. Tim Cook amigo y colaborador de Stave Jobs decidio ofrecer su (buena una parte) hígado a Steve Jobs
En el nuevo libro Becoming Steve Jobs, Cook recuerda haber ofrecido su hígado a Jobs luego de saber que ambos tenían el mismo tipo poco habitual de sangre y que combinaban. Posteriormente fue a casa de Jobs a ofrecérselo. “Él me cortó de inmediato, casi antes de que las palabras terminaran de salir de mi boca”, escribe Cook. “‘No’, me dijo. ‘Nunca te dejaría hacer eso. Nunca haré eso'”.
Los trasplantes de hígado pueden ser dados únicamente por donantes vivos. Una porción del hígado sano del donante es usada para remplazar el hígado del receptor y luego el del donante se regenera. Los resultados para ambas personas involucradas son mayormente favorables.
“Alguien que es egoísta no responde así. Él medio se levantó de la cama y dijo eso. Y esto era durante un tiempo cuando las cosas eran terribles. Steve sólo me gritó a mí cuatro o cinco veces durante los 13 años que lo conocí, y esta fue una de esas veces”, recuerda Cook.