ambién condenó los ataques contra hospitales y centros de atención médica, destacando la necesidad de proteger a los civiles y garantizar el acceso a la atención médica.
Mientras tanto, en Israel, han surgido críticas dentro de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) sobre el alto costo de la ofensiva en Gaza. Muchos han cuestionado si la campaña militar está logrando sus objetivos y si es justificable el número de víctimas civiles que se están produciendo.
A pesar de la presión internacional y las críticas internas, el gobierno israelí ha declarado que continuará con la operación en Gaza hasta que se logren los objetivos de desmantelar la infraestructura de Hamas y detener los ataques con cohetes contra el territorio israelí.
La situación en Gaza es desesperada y la población civil está sufriendo de manera inimaginable. Es crucial que se ponga fin a la violencia y se busque una solución diplomática y pacífica para poner fin a este conflicto que ha causado tanto sufrimiento y destrucción.
