En menos de una semana, dos hospitales dependientes del gobierno del Distrito Federal dieron de alta a una pequeña que presentaba sÃntomas de influenza porcina. Cuatro dÃas después de la primera visita al nosocomio, la niña de cinco años falleció en su domicilio a causa de una enfermedad respiratoria denominada pleuroneumonÃa.
Marco Antonio GarcÃa Balladar y su esposa, MarÃa del Carmen Meza, llevaron a su pequeña MarÃa Fernanda, quien tenÃa una fiebre de 38 grados, al Centro de Salud â??Dr. Luis Mazzoti Galindoâ?, el sábado 25 de abril. AhÃ, un doctor la revisó y sólo le recetó dos goteros con paracetamol cada ocho horas. La niña tenÃa que regresar a consulta tres dÃas después.
Al ver que no habÃa una mejorÃa en la salud de la pequeña, y además ahora se quejaba de dolor en los huesos, sus padres decidieron llevarla al Hospital Pediátrico de Peralvillo, el lunes 27.
Sin embargo, la atención fue la misma: los doctores le dijeron a la señora MarÃa del Carmen que su pequeña tenÃa una fractura en el fémur derecho y por ello le dolÃa su pierna. Además, presentaba algunos granitos en la cara y habÃa que esperar para saber si era varicela y probablemente por ello la niña presentaba cuadros tan altos de temperatura.
La familia regresó a su hogar, ubicado en el número 206 de la Calle 3, en la colonia AgrÃcola Pantitlán, delegación Iztacalco. La nueva receta que les entregaron indicaba que la niña debÃa tomar seis mililitros de paracetamol en jarabe cada seis horas, durante cinco dÃas. Pero la pequeña ya no pudo tomar esa dosis.
MarÃa Fernanda GarcÃa del Carmen comenzó a presentar insuficiencia respiratoria durante la noche del lunes; su respiración era cada vez más rápida, hasta que de un momento a otro, cuando el reloj marcaba las diez de la noche, la pequeña dejó de respirar.
Una vecina con conocimientos de enfermerÃa trató de auxiliar a la menor. A pesar de que intentó reanimarla con respiración de boca a boca, todo fue inútil. Aunque todavÃa no presenta sÃntomas, MarÃa Isabel Cedillo podrÃa ser una vÃctima más de la influenza porcina.
El diagnóstico de la necropsia señala que la muerte se debió a una pleuroneumonÃa no traumática. MarÃa Fernanda vivÃa con sus padres y tres hermanos. Ahora, Dulce Janette, Berenice y Marco Antonio, de nueve, tres y dos años, corren el riesgo de haberse contagiado.
Los padres de MarÃa Fernanda son conserjes de una unidad habitacional, donde viven aproximadamente 40 familias, y con las que tienen contacto todos los dÃas, ya que en el conjunto habitacional sólo hay una puerta de entrada y salida, que se encuentra a un costado de la casa de la familia GarcÃa Meza