Diferentes analistas de mercados hablan ya de una recesión inminente, hay indicadores que señalan que estamos viendo focos rojos en muchos mercados y hablan de una desaceleración económica real, importante y que necesitará una serie de medidas de parte de todos los países del mundo para poder reactivar motores que nos saquen del atolladero.
Estados Unidos y China están en una guerra comercial, Estados Unidos quiere que China mande menos productos a sus mercados; China quiere que Estados Unidos no sea tan proteccionista ya que enarbola la bandera del libre comercio a su beneficio.
Lo preocupante es que las dos naciones son las principales locomotoras del desarrollo comercial del mundo y arrastran economías a su crecimiento. Estas locomotoras están frenándose ya que se les está acabando el gas o empuje para seguir creciendo a un ritmo sostenible que permita hablar de desarrollo económico financiero.
Hay planteamientos que hablan de que la recesión será para finales del 2020, hay analistas que ya lo ponen en sus planes de desarrollo y prospección económica de inicios del 2020, pero en México quizá y estamos hablando de finales de este año.
El primer trimestre del 2019 el crecimiento del país fue casi nulo. Las perspectivas de crecimiento para el segundo trimestre quizá y sean similares, aunque algunos personajes del escenario político económico hablan de que ya el Gobierno Federal comenzó a soltar dinero para que no se detenga la economía nacional, convenios con empresarios buscan hacer crecer el PIB y parece que se puede ir sorteando todo. Pero el alza del dólar, el decrecimiento del precio del petróleo, la baja en la confianza del consumidor, el desempleo al alza, los salarios en contracción y un escenario internacional nada prometedor, hacen que los ingredientes de una tormenta perfecta se conjuguen para que hablemos de recesión de 2 a 3 trimestres en México.
Recordemos el dicho de que cuando Estados Unidos estornuda a México le da gripe; bueno a Estados Unidos y China les va a dar gripe, esperemos la pulmonía que México tendrá no sea muy grave; no podemos comparar la recesión que viene con la sufrida en 2009 que fue a nivel mundial por la crisis de las hipotecas y la quiebra bancaria, pero es un hecho de que la recesión está en el panorama financiero mundial; para la gente común es momento de no tener gastos, no deber en tarjetas y ahorrar, porque la contracción de mercados es una realidad ya palpable y que ya lo estamos viviendo desde ahora.