La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) fue galardonada hoy con el prestigioso premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades 2009 por ser a lo largo de sus casi cien años de existencia, “el modelo académico y formativo para muchas generaciones de estudiantes de diversos países, y nutrir el ámbito iberoamericano de valiosísimos intelectuales y científicos”, según el acta del jurado leído ayer por su presidente Ricardo Senabre, durante un acto celebrado en el hotel de la Reconquista de la ciudad asturiana de Oviedo.
Además de recordar que la UNAM “acogió con generosidad a ilustres personalidades del exilio español de la posguerra”, Senabre destacó que “ha impulsado poderosas corrientes de pensamiento humanístico, liberal y democrático en América y ha extendido su decisivo influjo creando una extraordinaria variedad de instituciones que amplían el mundo académico y lo entroncan en la sociedad a la que sirven”.
La candidatura de la UNAM, que fue propuesta por Carmelo Angulo Barturen, embajador de España en México, se impuso por una mayoría de votos en la última ronda a la candidatura del diario “The New York Times”.
Y entre los más de mil 500 apoyos que recibió figuran los de los escritores Gabriel García Márquez y Carlos Fuentes, el ministro español de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional Miguel Ángel Moratinos, el Colegio de México, los Premios Príncipe de Asturias Francisco Bolívar Zapata, Marcos Moshinsky, Ricardo Miledi, Antonio García Bellido, y Pablo Rudomín, y los rectores de las universidades de Sevilla, Granada, Barcelona, Valencia, Alcalá de Henares (Madrid), Carlos III (Madrid), Autónoma (Madrid) y Málaga.
Tras conocerse la noticia fueron muchos los españoles que mostraron su satisfacción. El príncipe Felipe envió un telegrama de felicitación a José Narro en el que recordó la “generosa acogida” de la UNAM a los intelectuales españoles “en tiempos difíciles”.
El heredero de la corona española subrayó además el que el jurado haya valorado de la UNAM “la excelencia de su tradición académica, su influencia y compromiso solidario con el desarrollo cultural del continente iberoamericano”.
También el ministro español de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional, Miguel Ángel Moratinos, consideró “muy merecido” el premio y destacó el papel de la UNAM en el impulso de “poderosas” corrientes de pensamiento humanístico, liberal y democrático en América Latina.
El catedrático de Literatura de la Universidad de Salamanca Ricardo Senabre, presidente del jurado, dijo que la UNAM “ha derramado su saber y el amor a la libertad a la democracia por toda América”. Además recordó la acogida que brindó a muchos intelectuales españoles exiliados tras la Guerra Civil.
“Allí encontraron un acomodo digno para seguir ejerciendo su profesión, formando alumnos y creando escuelas que nos llenan de orgullo porque son nuestra aportación a México, aunque sea a costa de un hecho tan doloroso”, aseguró
También el empresario y miembro del patronato de la Fundación Príncipe de Asturias, Antonio Suárez, se mostró muy contento por la concesión del galardón a una de las instituciones que representan el “alma de México”.
“En México hay muchas universidades, pero la UNAM es la casa mater que va más allá de una casa de estudios, es el universo donde se confrontan ideas y de donde han salido grandes pensadores, premios Nobel, premios Príncipe de Asturias e incluso presidentes del país y de otros países iberoamericanos”, destacó.
Suárez aseguró que este galardón va a elevar la moral de los mexicanos que han pasado muchas cosas, “entre ellas la guerra contra el narcotráfico, una lamentable pandemia surgida en Norteamérica y achacada a México y la desafortunada noticia de estos días en que un grupo de niños fallecieron en una guardería”, dijo.
“Un país tan grande y tan estupendo como es México necesita también tener un alivio y este premio le viene muy bien, y los mexicanos van a estar muy felices”, señaló.
El editor Hans Meinke, también miembro del jurado, definió a la UNAM como “un fenómeno único en el mundo hispánico, y una institución irrenunciable no sólo por la labor académica que realiza entre sus más de 300 mil alumnos sino por su implicación en la vida social y cultural”.
Mientras el secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), Álvaro Marchesi, destacó que la UNAM “lleva décadas formando profesionales útiles para la sociedad y siendo la casa de acogida del pensamiento crítico iberoamericano en momentos difíciles”.
Por su parte, el presidente de la Asociación Iberoamericana de la Comunicación, Carlos Fernández Collado, destacó que es un premio que traerá “mucha esperanza en el sentido de revalorizar el pensamiento iberoamericano”.
“La UNAM a través de los exiliados españoles en México pudo estudiar con gran empeño las similitudes existentes entre España e Iberoamérica y las diferencias”, aseguró.
Esta es la segunda vez en la historia del premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades, que está dotado con unos 70 mil dólares y una escultura de Joan Miró, en que el premiado es una universidad. La primera ocasión fue en 1990 en que un centro de educación superior de El Salvador, privado y sin fines de lucro: la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, resultó ganadora