Vandalismo, la violencia y la anarquía ha privado en Chilpancingo y esto no se puede permitir ya que los maestros del CETEG al no ser atendidos en sus demandas se dedicaron con violencia, a hacer vandalismo y sembrar la anarquía en el estado de Guerrero al menos por unas horas.
El balón está en manos del gobernador Ángel Aguirre quien parece que por primera vez no estará vacilando en detener a los líderes de la CETEG y que ahora mismo quizá esté hablando con el gobierno federal para solicitar ayuda y poner en su lugar a estos criminales que se dicen maestros en Guerrero.