El paÃs celebrará este año elecciones federales para renovar diputaciones y en seis estados se votará también por congresistas locales, alcaldes y gobernadores, bajo las peores condiciones de seguridad en casi un siglo. El recrudecimiento de la violencia entre organizaciones criminales ha cobrado más de 8 mil 500 vidas de 2007 a la fecha â??según la PGRâ??, lo cual ejerce una presión extraordinaria sobre las jornadas en 70 de los 300 distritos electorales (casi 25%), dice el diagnóstico del Instituto Federal Electoral difundido a principios de este mes.
Las condiciones propicias para la infiltración de dinero mal habido en las campañas demandó de ese organismo un blindaje y comprometió a los partidos a estrechar sus procesos de selección de candidatos, sujetándolos al escrutinio fiscal y personal. Fuentes consultadas creen, sin embargo, que esto es poco factible y hasta inútil.
â??La sospecha que envuelve a cualquier candidato o precandidato no se quita con ningún blindaje. El IFE no es capaz si quiera de dar seguimiento puntual a los gastos que reportan las mismas dirigencias regionales de los partidos, asà que menos podrá fiscalizar recursos del crimen organizado o evitar que se elijan candidatos de dudosa reputación. En cada pueblo todos saben quién es quién, y por eso debiera mejor fincarse responsabilidad penal a los partidos que los eligenâ?, opina Tatiana Clouthier, hija del legendario MaquÃo, hoy metida en el activismo social en Nuevo León, que tendrá elecciones concurrentes en julio.
Menciona como referencia el asesinato (junio 2007) con ráfagas de metralleta del diputado local César Mario RÃos Gutiérrez, originario de Cerralvo, municipio dedicado a la ganaderÃa y la agricultura, con tradición criminal. Los medios de comunicación locales retomaron entonces un expediente judicial de 1986, cuando el polÃtico fue sometido a proceso por posesión de 12 kilos de mariguana, asà como una declaración ministerial donde se le relaciona con la venta de autos robados. â??Al final, es más importante conocer la manera en que cada partido polÃtico selecciona a sus candidatos, antes que aplicar la fiscalización de los fondos que manejaâ?, añade Tatiana Clouthier.