Nació en Pedroche, Córdoba, España. Virrey de la Nueva España del 25 de septiembre de 1584 al 17 de octubre de 1585. Murió en Madrid, España, en 1591
Llegó a la Nueva España en calidad de inquisidor, fue investido luego del cargo de visitador, más tarde elevado a la dignidad de arzobispo y remató su carrera en América al nombrarlo Felipe II virrey, ejerciendo en este periodo las cuatro responsabilidades simultáneamente.
Al igual que su antecesor, procuró poner remedio a la escandalosa corrupción imperante, para lo cual encarceló a autoridades y jueces corruptos, mandó colgar a los más abusivos y destituyó a los venales.
Por otra parte, el obispo-virrey organizó la iglesia católica en México. Convocó al tercer concilio mexicano, en el que se reunieron los obispos y los superiores de las órdenes religiosas para establecer las normas que regirían a los eclesiásticos y las formas en que los fieles deberían practicar el culto católico.
Terminado su cargo fue llamado a España y nombrado por el rey patriarca de las Indias y presidente del Real y Supremo Consejo de Indias