Las oficinas del Alto Comisionado de Naciones Unidas para Derechos Humanos (ACNUDH) y del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) pidieron suspender los retornos involuntarios de personas a Haití, por razones humanitarias.
A un mes del terremoto de 7.0 grados Richter que devastó la capital haitiana y sus alrededores, ACNUDH y ACNUR pidieron a la comunidad internacional en una declaración conjunta no regresar a haitianos a su país hasta que la situación se normalice y se estabilice.
Instaron a los países en los que se encuentran haitianos a que les ofrezcan protección a pesar de que no estén con carácter de refugiados, con base en razones humanitarias.
En rueda de prensa este viernes, la portavoz del ACNUR, Melissa Fleming, subrayó ‘este no es el momento de regresar a la gente’.
Al ser interrogada sobre qué países en concreto están regresando a haitianos a su país en contra de su voluntad, Fleming señaló que ‘no venimos a señalar ni a dar nombres, lo estamos pidiendo por razones humanitarias, este no es el momento de regresar a la gente, no ahora’.
Por su parte, el portavoz del ACNUDH Rupert Colville, señaló que por una u otra razón hay un gran número de haitianos que antes o después del terremoto llegaron a otros países y coincidió en subrayar que no es el momento de regresarlos en estas circunstancias.
ACNUR y ACNUDH señalaron que mientras que la respuesta internacional al desastre está en marcha, los servicios y la asistencia todavía tienen que llegar a una parte significativa de la población afectada, y la situación todavía es compleja.
Fleming indicó que un gran número de personas todavía carece de servicios básicos como refugio, alimento, agua y ayuda médica.
Recordó que más de un millón de personas se han quedado sin hogar y reiteró su preocupación por el gran número de población vulnerable, incluyendo los heridos y niños huérfanos