Yemen pidió ayuda a Occidente contra “cientos” de militantes de Al Qaida que operan en este país, mientras trascendió el miércoles que Washington busca junto con el gobierno yemení posibles blancos militares. “Necesitamos más entrenamiento, tenemos que ampliar nuestras unidades antiterroristas y esto quiere decir suministrarles el entrenamiento necesario, equipos militares, medios de transporte”, declaró en la noche del martes a la BBC el ministro de Relaciones Exteriores yemení Abu Bakr al-Kurbi, citando como problema particular la falta de helicópteros.
“Hay apoyo, pero debo decir que es inadecuado”, añadió en alusión a la ayuda occidental. Kurbi destacó la amenaza que representa la presencia de Al Qaida en Yemen y advirtió que los yihadistas podrían urdir nuevos ataques como la tentativa de atentado contra un avión estadounidense el día de Navidad, reivindicado por su brazo de la península arábiga. “Desde luego que hay varios militantes de Al Qaida en Yemen y algunos de sus líderes… no puedo darle la cantidad exacta. Quizás cientos, doscientos o trescientos”, dijo.
“Pueden planificar ataques como el que acabamos de tener en Detroit”, precisó. Por otra parte, la cadena CNN informó que las fuerzas especiales estadounidenses están trabajando con militares yemeníes en la identificación de posibles blancos para ataques militares en este empobrecido país, limítrofe con Arabia Saudita, que enfrenta un levantamiento chiíta en el norte y una rebelión secesionista en el sur.
“Las fuerzas de operaciones especiales estadounidenses y las agencias de inteligencia, junto con sus homólogos yemeníes, están trabajando para identificar blancos potenciales de Al Qaida en Yemen”, afirmó una fuente estadounidense citada por CNN. Un oficial de seguridad yemení declaró a la AFP que Saná quiere recibir más apoyo de inteligencia de Washington, pero subrayó que cualquier acción militar competía exclusivamente a las fuerzas yemeníes.
“Instamos a Estados Unidos a fortalecer nuestra cooperación en inteligencia. Pero las operaciones son responsabilidad de los yemeníes”, declaró. Los funcionarios estadounidenses citados por CNN también indicaron que Yemen no brindó su consentimiento para ninguna operación terrestre estadounidense.
“Yemen aún no consintió un tipo de ataque helitransportado de fuerzas especiales para desembarcar comandos estadounidenses con la misión de capturar a sospechosos para interrogarlos”, declaró un segundo funcionario estadounidense citado por CNN. Los dos funcionarios citados por CNN subrayaron que ninguna decisión ha sido adoptada sobre una acción militar de Estados Unidos en respuesta a la tentativa de atentado contra un avión de Northwest Airlines reivindicado por Al Qaida en Yemen.
La búsqueda de blancos “apunta a que estén preparados con opciones para la Casa Blanca si el Presidente (Barack) Obama ordena un ataque de represalia”, declararon a CNN. “El esfuerzo apunta a descubrir si los blancos pueden ser vinculados específicamente al incidente con el avión y a su planificación”.
El nigeriano Umar Faruk Abdulmutallab es acusado de tentativa de atentado contra un avión estadounidense procedente de Amsterdam con destino a Detroit, con explosivos escondidos en su calzoncillo. Se sospecha que fue entrenado para su misión por un fabricante de explosivos de Al Qaida en Yemen, país de origen de la familia de su jefe, Osama Bin Laden.
Yemen reconoció que Abdulmutallab estuvo en el país hasta hace pocas semanas, después de haberse inscrito en un curso de árabe. El ministro de Información Hassan Ahmad al-Lawzi indicó el martes que la visita de este año era la segunda de Abdulmutallab al país. “Vino dos veces a Yemen. La primera vez entre 2004 y 2005 y la segunda en agosto pasado”, dijo Lawzi.