Amarga sorpresa para los capitalinos fue la disposición del gobierno del DF que obliga a tramitar la tarjeta de circulación con chip.
Ante el rechazo generalizado de los legisladores de PRI, PAN y PVEM, el secretario de Finanzas, Mario Delgado, dijo que no hay interés recaudatorio en la medida, y Armando Quintero, secretario de Transporte, negó que los recursos servirán para hacer el cochinito electoral de Marcelo Ebrard.
Ha quedado poco clara la medida que es obligatoria; empero, para el GDF, el chip que contendrá la nueva tarjeta podrá servir para la localización satelital del vehículo en caso de robo, sin embargo, el argumento no ha convencido del todo a los capitalinos
Pareciera increíble la falta de escrúpulos y decencia de las gentes que detentan el poder. Cada día nos damos cuenta de golpe y porrazo de las nuevas estratagemas que implementan para obtener de nosotros, los ciudadanos, recursos para solventar sus mas oscuras y tenebrosas ambiciones personales y egocentristas.
El Gobierno del Distrito federal acaba de ratificar la implementación de la nueva tarjeta de circulación vehicular con chip, de la cual desde hace algún par de años se andaba cuchicheando. Dicha tarjeta tendrá un costo de $220 pesos. Contará con un chip electrónico similar al de las licencias de conducir y tendrá integrados 21 candados de seguridad que buscarán evitar la falsificación del documento, y se pretende que se renueve cada 3 años, para lo cual es necesario desenbolsar un dinero extra para obtener dicha renovación. Hé aquí una nueva estratagema para obtener recursos; la cual, de vivir en un país con un nivel socioeconómico óptimo sería un instrumento de mucha valía, pero en un país con crisis financiera, moral, política y social, se presenta como un insulto y una mofa a toda la desgracia de la población que convulsiona al Distrito federal y al país en general.
En México, tener un auto es signo de lujo, no de necesidad utilitaria. Tal parece que este es el mensaje que los hombres del poder nos quieren dar a entender con sus legislaciones. Creo que ninguno de nosotros estaríamos en desacuerdo con la implementación de políticas de seguridad para garantizar una calidad de vida óptima en esta caótica ciudad, si no fuera porque esas implementaciones no se hacen con el fin de buscar el bien común, si no con el fin de satisfacer las necesidades narcisistas de unos cuántos por poder y dinero, sin que los recursos erogados se utilicen para aquello para lo que se recaudaron realmente.
La justificación es la misma que el RENAVE y el RENAUT: “para dar seguridad a la población”. En México “la seguridad” no se entiende como el conjunto de legislaciones e instituciones que velan por la integridad de la población y sus bienes materiales, si no como el conjunto de prohibiciones que los hombres del poder ciernen sobre la población y por las cuales debemos pagar con impuestos, generadas por la falta de capacidad para administrar al país correctamente, y al desinterés por solucionar de fondo los motivos de toda la podredumbre moral, político y social que ha hecho que ninguna ley que se emite, se respete y se ejecute como debiera, engendrando corrupción, burocracia, nepotismo y despotismo al interior de las dependencias de Gobierno e Insituciones Federales.
En 2001, durante su gestión como Jéfe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador implementó el programa de reemplacamiento en todos los autos del Distrito Federal. En aquél entonces los objetivos eran los siguientes:
.- Dotar de nuevas placas a un universo aproximado de 3 millones de vehículos.
.- Generar un Padrón confiable y actualizado de los vehículos del Distrito Federal.
.- Introducir mayores elementos de seguridad en las placas.
.- Otorgar un servicio de calidad para los ciudadanos.
El programa era totalmente gratuito, y aunque hubo mucho descontento por parte de la población por la metodología implementada y los tiempos de entrega de las placas, el propietario participó cumpliendo su parte en un trámite que por obligación del Gobierno, debía solventar con recursos públicos corrientes. Se aseguró entonces que se contaría con la garantía de una base de datos confiable de los autos que circulaban en la ciudad. Incluso se promovió el plan de que si reciclabas tus placas te regalaban una planta. Dado que en aquél entonces no contaba con auto, no supe si se llevó a cabo este canje o no.
Actualmente, el nuevo jefe de Gobierno pretende hacernos pagar para imponernos una tarjeta de circulación con chip y 21 candados de seguridad bajo el mismo argumento de antes, pero sin considerar ni detenerse a evaluar que la gente no tiene porqué pagar por un trámite de esta naturaleza, a menos que sea como reposición en caso de robo o pérdida del documento en cuestión; y aparte nos hacen el gran favor de demostrarnos su benevolencia argumentando ” ….que un reemplacamiento costaría mucho mas y la gente actualmente no tiene dinero para pagar esas cantidades…”.
Señores de SETRAVI y Gobierno del D.F., un trámite de reemplacamiento o cambio de tarjeta de circulación no tiene por qué costarnos mas dinero del que ya pagamos cuando compramos nuestro auto, o realizamos el cambio de propietario o pagamos para obtener una reposición; ¿porque se vanaglorian de una magnanimidad que no debe ser, ni tiene lugar o cabida?; ¿porqué nos quieren hacer creer que son condescendientes con nosotros y nuestra desgracia social, esgrimiendo un discurso ridículo como el de “…un reemplacamiento costaría mucho mas…”, cuando la realidad es que un trámite así debe ser gratuito?; ¿Para qué entonces sirven los millones de pesos obtenidos del impuesto de la tenencia vehicular, impuesto por demás absurdo e inconsitucional?; ¿Para qué sirve el dinero generado por la recaudación del Impuesto Sobre Autos Nuevos?; ¿Para qué entonces sirve el dinero que se pagan por derechos de emplacamiento de autos nuevos, o cambios de propietario,o reposiciones de documentos y/o láminas?. ¿Dónde está ése dinero que no lo vemos reflejado en obra de mejoramiento e infraestructura urbana?
Con seguridad los chacales que detentan el poder ya hicieron lo necesario para cambiar las legislaciones y ordenanzas que les brinda la impunidad necesaria para implementar una medida tan intransigente como esta. De modo que cualquier queja relacionada al caso se contestará con el típico ademán y talante prepotente de Ebrard ” Es la ley y se tiene que acatar”, moviendo su cabeza con lujo de soberbia, despotismo y presunción de amparo y fuero. Ebrard defiende su imposcición con el argumento que la implementación de este sistema implica mantener vigente una tecnología muy cara, que no podría sustentarse si la tarjeta es gratis. De ser así y si se destina todo el dinero a sostener el sistema, la cantidad que se calcula recaudar (alrededor de 700 millones de pesos) es una cantidad altísima para justificar la implementación de un sistema así. Es absurdo sostener una base de datos confiable y que cueste 600 millones de pesos. ¡Es ridículo!.
Los ciudadanos nos encontramos en un punto en el que no alcanzamos a diferenciar entre las extorsiones de carácter “criminógenas” (parafraseando al Secretario de Gobernación) de las extorsiones oficiales operadas por los hombres del poder en turno. Las formas de reducir a la gente a una mera condición de reses en corral, las cuales son factibles de ser exprimidas por medios gangsteriles en aras de “la seguridad nacional”, dan cuenta de una falta increíble de escrúipulos, tacto político y lo mas escencial en cada ser humano: Sentido común.
Hace casi 10 años nos dijeron que el reemplacamiento serviría para tener un padrón confiable de la cantidad real de autos avecindados en el D.F.; En la actualidad nos dan el mismo argumento para justificar el pago de la tarjeta de circulación “inteligente”. Eso implica que en 10 años nunca se tuvo un verdadero control de los autos que circulaban con placas del D.F. y por eso se ven obligados a implementar un nuevo control bajo amenaza fascista de que aquél que no lo haga será exprimido aun mas por medio de multas, en pocas palabras será criminalizado si no paga. ¿Porqué la Seguridad nos tiene que costar tanto, adicionalmente a los impuestos que pagamos?; ¿Qué me garantiza que ahora, los padrones arrojados por el pago de la cantidad van a ser mas confiables y en dos años no salgan a decir que es necesario otro trámite para confirmar el padrón?; ¿Cómo va a evitar que pagando 220 pesos me roben el auto con todo y tarjeta de circulación?. Por si no se habían dado cuenta, el crimen organizado ya no necesita falsificar documentos; es de nacos jodidos falsificar documentos; lo de hoy, lo que le resulta más fácil, redituable, original y garantizado es infiltrar instituciones y corromper funcionarios para obtener documentos de carácter oficial legítimos y cometer ilícitos con absoluta impunidad. La vida está tan devaluada en México que por cualquier cantidad es muy fácil corromper funcionarios. Una tarjeta con chip no los va a detener.
Las prohibiciones fascistoides (oops!, perdón, quise decir “las medidas de seguridad”) para “detener al crimen” se han radicalizado y enfocado equivocadamente en contra de los ciudadanos que tratan de vivir tranquilos, trabajando, pagando impuestos, soportando a todos los bandos que los exprimen, aguantando impunidades, injusticias, desigualdades, intransigencias, madruguetes legislativos, mentiras, calumnias, imposiciones que devalúan el bienestar social, alzas, devaluaciones, “catarritos´” bursátiles; pero de ningún modo se han radicalizado al interior de las instituciones para limpiar a todos esos funcionarios corruptos que trafican con permisos oficiales, documentos legales, firmas oficiales para avalar fraudes de todo tipo, influencias, bases de datos secretas y demás informaciones, trámites, fueros y prebendas que competen a un Estado y a un Gobierno el mantener a buen resguardo y administración.
Porqué le cuesta tanto trabajo a Ebrard hablar con sinceridad y decirnos: necesito recursos para mi candidatura a la presidencia en 2012, en lugar de salirnos con estulticias políticas amparadas por ordenanzas y leyes sobadas y manoseadas a su antojo y beneficio.
Me da tristeza ver a México hundido en la podredumbre social y moral.
Me uno a la desobediencia civil como método de presión para la derogación de esta estupidez. ¡Ya estuvo suave!.
Fuentes:
http://www.portalautomotriz.com/tramites/reemplacamiento/
http://www.milenio.com/node/441937
http://vivirmexico.com/2008/12/nueva-tarjeta-de-circulacion-con-chip-para-el-df